Karim Benzema enciende la alarma. El delantero está siendo la gran estrella del Real Madrid en ataque durante las tres últimas temporadas, pero su futuro está en el aire. Tiene contrato hasta 2023, cuando ya tendrá 35 años en su carnet de identidad. De ahí que haya pedido una reunión con Florentino Pérez para tratar su futuro.
Y todo ello pendiente, a su vez, de Erling Haaland. El francés sabe que el club blanco está muy interesado en firmar al noruego, que podría llegar el próximo verano junto a Kylian Mbappé. Un nuevo ataque que puede alterar su rol en el equipo de Carlo Ancelotti y que puede justificar su preocupación.
De ahí que, según informa el medio francés Onze, Benzema habría comunicado a Florentino Pérez que quiere reunirse con él en el próximo mes de marzo. La intención del futbolista es conocer de primera mano el plan del presidente en el próximo mercado de fichajes. Saber si cuentan con él como pieza clave o si, por el contrario, podría perder protagonismo.
El galo renovó su actual contrato el verano pasado y, a diferencia de otros jugadores de su edad, lo hizo por dos temporadas. Una muestra clara de que el club sigue confiando en él, al menos a corto plazo. Esos 35 años que cumple a finales de 2022 también se deben tener en cuenta, así como los fichajes que pueden llegar en verano.
Mbappé tiene pie y medio en la casa blanca. Haaland se convierte ahora en el gran sueño de Florentino. Y Vinícius ha pasado de ser una promesa a una gran realidad. Benzema quiere hablar de su contrato y su rol en el Real Madrid del próximo curso y hacerlo cara a cara con Florentino Pérez.
Una operación buena para el Real Madrid sería vender a Benzema y con el dinero fichar a Karim Adeyami y Benjamin Sesko. Los fichajes de Mbappé y Haaland son aparte. También estaría bien darle una oportunidad al canterano Latasa. Y para el centro del campo Ryan Gravenberch y Aurelian Touchameni. Y para el futuro, Endrick, hay que atarlo ya.