El Real Madrid ha cerrado otro fichaje para la próxima temporada, aunque todavía no ha sido confirmado oficialmente, ni será anunciado hasta que no llegue el verano. El primero que tienen atado es el de Fran García, que volverá después de su exitoso periplo por el Rayo Vallecano, donde se ha convertido en uno de los mejores laterales zurdos de La Liga Santander. Y tendrá un coste aproximado de 10 millones de euros. Álvaro Rodríguez, por su parte, subirá desde el filial.
Con estos dos movimientos ya pactados desde hace varias semanas, ahora le ha tocado el turno a Brahim Díaz. Florentino Pérez ha tomado la decisión de recuperar al internacional español, que también ha sacado provecho de su paso por las filas del Milan, si bien todavía no se sabe el coste que tendrá. Dependerá de lo que decidan hacer los italianos, que dan por perdida a su estrella, y asumen que no podrán retener al media punta otro curso más.
No obstante, pueden ejercer la opción de compra de 22 ‘kilos’ que tienen pactada, aunque en el Santiago Bernabéu podrán recuperarlo ‘ipso facto’ por 27. El presidente ya tiene el OK del ex del Málaga y del Manchester City, que al principio se mostraba un poco reticente con la idea de regresar a Concha Espina, si no le garantizaban minutos y continuidad. Y en especial, señalaba a Carlo Ancelotti como el principal y único responsable de sus dudas.
Dejó bien claro que no quería coincidir con ‘Carletto’, y que para que volviera al Madrid primero debería de haber un cambio de entrenador. Pero una vez que ya está casi asegurado que llegará otro técnico, el atacante de 23 años ha dado el visto bueno a la oferta, como ha apuntado ‘OK Diario’. Y ya estaría pensando en el dorsal que cogerá, aunque se daba por seguro que heredaría el dorsal ‘11’ que dejará libre Marco Asensio, quien precisamente puede tomar el camino inverso, y acabar en San Siro.
Sin embargo, ahora Brahim también tiene la oportunidad de lucir el número ‘10’, viendo que la continuidad de Luka Modric se ha complicado enormemente en las últimas semanas.
Ya está bien de engañar a la gente con anuncios de noticias de última hora, que en realidad ya están más pasadas que un higo seco