Karim Benzema se despidió del Real Madrid el pasado 4 de junio en el partido ante el Athletic con un gol y una ovación del Santiago Bernabéu horas después de anunciarse su marcha del club 14 años después de llegar. Su marcha tuvo un último servicio para Florentino Pérez al haber echado un cable con la ruptura entre Kylian Mbappé y el PSG que favorece su posible llegada a Chamartín.
Según cuenta Marca, la salida repentina de Benzema del club madridista, cuando se daba por hecha su renovación, cambió todo de cara a su compatriota. Antes de esta noticia, Mbappé estaba cercano a su renovación por el PSG pero esta decisión hizo saltar todo por los aires.
Apenas unos días después llegó la carta de Kylian al club parisino en la que mostraba su negativa a ejercer la opción para renovar su contrato hasta 2025. Esto provocó un terremoto en París que propició que se volvieran a disparar los rumores con el Real Madrid y Florentino Pérez a la espera de resolver la situación para abordar su fichaje.
Ahí llegó la respuesta del PSG filtrada que confirmó Al Khelaïfi en público en la presentación de Luis Enrique como nuevo técnico del conjunto de la capital francesa. El club daba dos semanas de margen a Mbappé para que aceptara la oferta de renovación o le venderían este mismo verano. En ningún momento, en París aceptarían que su estrella se marchase en 2024 como agente libre sin percibir dinero por su traspaso.
Mientras, Kylian quiere agotar su contrato para no perder las millonarias cantidades que aún le quedan por ganar en París, además de la prima de fichaje del Real Madrid mayor si llegara libre. Su intención original pasaba por aguantar hasta el próximo verano en Francia para disputar los Juegos Olímpicos en su ciudad con los 'bleus' pero Benzema cambió todo dando inicio de nuevo al enésimo culebrón del verano.