La pasada temporada estuvo marcada por la situación de Toni Kroos y Luka Modric y la duda sobre el futuro de ambos en el Real Madrid. El alemán ya ha declarado que, mientras siga a un nivel alto, va a seguir jugando al fútbol, pero esa sombra de su retirada se ha convertido en una amenaza para los madridistas tal y como ha demostrado con su exhibición ante el Getafe.
Los de Ancelotti remontaron a los azulones con un triunfo en los últimos minutos gracias a los goles de Joselu y Jude Bellingham, una vez más. Sin embargo, la victoria merengue no se entiende sin la entrada de Kroos en el descanso del envite para darle la vuelta a la tortilla.
Toni Kroos salió por un Camavinga que intentó tomar el mando del juego pero no lo logró. Ni siquiera Luka Modric, en su primera titularidad del curso, que solo tuvo una buena actuación cuando entró al campo su viejo compañero en la medular.
El Real Madrid tuvo una posesión amplísima en la primera parte, pero apenas pudo dañar a la defensa del Getafe más allá de dos ocasiones de Joselu y Modric. Fue tras el descanso cuando comenzaron a abrirse espacios y eso fue gracias a la actuación de futbolista germano, que incluso pudo anotar su gol en una doble ocasión desbaratada por el poste primero y por David Soria después.
El alemán, a pesar de habituarse a salir desde el banquillo esta temporada, ha demostrado que sigue siendo muy necesario para el Real Madrid entre tanto jugador físico. Ahora, sólo le queda decidir hasta cuándo va a seguir jugando al fútbol y el madridismo espera que sea por mucho tiempo más.