Cádiz, Nápoles y ahora Granada. Esos son los tres partidos que habrá disputado el Real Madrid en los últimos siete días, todo una calendario que cabrea a Carlo Ancelotti que ve como está perjudicando gravemente al equipo respecto a lesiones. En especial, con la última alarma que ha encendido Jude Bellingham en el último entrenamiento.
El técnico italiano ya avisó antes de enfrentarse al conjunto gaditano lo peligroso que es tener una gran carga de partidos en un lapso de tiempo tan corto. Sin embargo, su discurso no generó ninguna repercusión y este viernes en rueda de prensa insistió en la mala organización de los campeonatos con otra encrucijada en diciembre: "Quiero destacar el del jueves 21 a las 21:30h. En Vitoria va a hacer bastante frío, pero es lo que hay. Creo que se podría haber jugado un poco antes, porque algunos se van a Sudamérica por Navidad y esto les cortará vacaciones. Descanso. No tiene sentido ese horario".
Después de enfrentarse al Granada, los merengues tendrán un final de año exhaustivo con cuatro partidos en doce días y tres de ellos como visitante en el que viajarán a Sevilla (Betis), Alemania (Unión Berlín) y Vitoria (Alavés). Recibirán al Villarreal en el Bernabéu.