Jude Bellingham deja atrás el apagón... y enciende la alarma por su tobillo. Se estaba hablando en las últimas semanas de su falta de gol en este inicio de año, lejos de las cifras asombrosas de sus primeros partidos como jugador del Real Madrid. Este sábado, en el partido ante el Girona FC, dejó atrás su sequía, pero también tuvo que pedir el cambio.
El inglés marcó un doblete tirando de oportunismo en un partido en el que, esta vez sí, jugó como '9'. Jude fue el jugador más adelantado del equipo de Carlo Ancelotti durante todo el partido, sobre todo en fase defensiva, con Vinícius y Rodrygo haciendo coberturas por los costados y el '5' descolgado arriba.
En esa posición de '9' llegó su primer gol. Fue en el 35', tras una asistencia maravillosa de Vinícius con el exterior desde el costado zurdo. Bellingham regateó a Gazzaniga e hizo el 2-0 a puerta vacía.
Ya en el segundo tiempo, el inglés tiró de oportunismo para hacer el 3-0 tras otra jugada soberbia de Vinícius, empujando a la red la pelota tras la intervención del portero del Girona.
Ya con 3-0 en el marcador, Jude pidió el cambio en el 57'. Se sentó en el suelo, se llevó la mano al tobillo izquierdo, se quitó la bota. Y Ancelotti tuvo que meter a Brahim Díaz en su lugar.
Y es que Bellingham se llevó dos golpes importantes en la misma zona. El más preocupante llegó al inicio del segundo tiempo, cuando recibió un pisotón involuntario de Pablo Torre. El futbolista madridista se dolió durante unos minutos y fue atendido por los médicos, pero acabó volviendo al césped.
Le dio tiempo a anotar el 3-0 y, tras el tanto, que dejaba el partido visto para sentencia, se tiró al suelo y pidió el cambio a Ancelotti. Ya en el banquillo, los médicos le atendieron ese tobillo y se lo rodearon de hielo. De momento, el futbolista queda pendiente de las primeras exploraciones médicas.