El futbolista del Real Madrid Antonio Rüdiger denunció esta semana a un periodista que le había relacionado con el ISIS por una foto en una publicación en sus redes. La colocación del dedo índice del futbolista alemán señalando el cielo hizo que Julian Reichelt reaccionara a través de un tweet explicando que "la Oficina Federal para la Protección de la Constitución llama este gesto "el dedo de ISIS". Lo que tuvo una respuesta tanto por parte del zaguero como de la propia federación alemana de fútbol. Ahora, el exjugador del Chelsea se ha pronunciado en este respecto.
En unas declaraciones a Bild, el internacional alemán señaló que "he dado a terceros la oportunidad de malinterpretar deliberadamente mi publicación para dividir y polarizar". Por ello, decidió dar el paso de hacer una declaración clara en la que "no permitiré que me insulten y denigren como islamista". "Se trata de propaganda y división", señaló añadiendo que "siempre me defenderé contra esto".
En este sentido explicó que de la misma manera que se considera "musulmán devoto" y practica su fé, se distanció de forma firme de "cualquier extremismo y acusaciones de islamismo". "La violencia y el terrorismo son absolutamente inaceptables", exclamó detallando que "defiendo la paz y la tolerancia".
Por otro lado, no duda en explicar lo que significa el gesto que realiza en la instantánea. "El gesto que utilicé se llama dedo tawhid", dijo expresando que "en el Islam, esto se considera un símbolo de la unidad y unicidad de Dios". Un ademán muy extendido entre los alemanes de todo el mundo y al que el "Ministerio Federal del Interior lo ha clasificado como no problemático".
El futbolista añadió su agradecimiento a la Federación de Fútbol de Alemania por su apoyo. Ya que, no dudó en denunciar las palabras del periodista considerándolas como delito de odio.
Cabe recordar que también el periodista respondió en su momento a esta denuncia desde la DFB, mostrando su sorpresa y explicando que "este gesto ha sido completamente cooptado por los terroristas durante las últimas dos décadas" y que se había convertido "indiscutiblemente" en el saludo de ISIS. "Es una normalización de una ideología terrible que ya ha ocupado demasiado espacio en este país"