La banda izquierda del Real Madrid, una mecha muy corta que podría estallar en el vestuario

"El próximo año es problema del míster, es un buen problema. Yo estoy tranquilo", esas fueron las palabras de Rodrygo Goes después de la victoria ante el Athletic cuando le preguntaron por la llegada de Kylian Mbappé. Un partido en el que el delantero carioca brilló en el Santiago Bernabéu con un doblete que pone fin a una mala dinámica goleadora y, para sorpresa de algunos, lo hizo jugando desde la banda izquierda.

Una papel que volvió a cumplir con nota para cubrir la ausencia de Vinicius Júnior, dueño actual de esa posición. Sin embargo, si las dudas están presentes ahora sobre quién rinde mejor ahí, la llegada del francés genera aún más problemas sobre quién debe ceder y aparcar su ego en una "pelea" que puede alterar el orden del vestuario.

La paz en el Real Madrid, en peligro

Carlo Ancelotti ha conseguido un vestuario muy unido que rema hacia la misma dirección, sin lucha por ser la estrella a pesar de que algunos dejaron caer que la emergente figura de Jude Bellingham podía afectar a los brasileños. Todo lo contrario, entre ellos se animan durante los partidos y lo celebran con una sinergia que parece que llevasen jugando toda la vida juntos.

Eso ha permitido al Real Madrid que no haya sobresaltos ni individualidades que alteren las tácticas del italiano. Sin embargo eso podría cambiar una vez llegue Kylian Mbappé al Santiago Bernabéu, un jugador de carácter muy fuerte que llegará con la aspiración de ser la estrella por el equipo nada más aterrizar en Madrid.

Sus problemas con Luis Enrique evidencian que no le gusta ni cuando sale sustituido ni cuando juega en una posición en la que no se encuentre cómodo y ya ha dicho que jugar por la izquierda es donde más le gusta. El problema comenzará cuando los tres estén en la plantilla y le pidan a Carletto jugar en la misma posición.

Ancelotti, problemas de pizarra

El italiano siempre se ha caracterizado por saber manejar un vestuario de estrellas. El vestuario le respeta y es uno de los mejores técnicos de la historia del club. Ha hecho que el equipo funcione con 4-4-2 donde los cariocas se mueven libremente en los últimos metros, dejando ver en más de una ocasión a ambos por la misma banda y dejando huérfana la derecha.

Con Mbappé se abandonaría la idea de tener cuatro mediocampistas y jugar con tres delanteros siempre y cuando quiera mantener a los tres con Endrick, Brahim  y Joselu en la vanguardia. El morbo y la expectación crece con el paso de las semanas para saber si Kylian caerá de pie en el vestuario para llegar al Real Madrid a otro nivel. Con este tridente, la izquierda tiene muchas alternativas per, como dijo Rodrygo, "son muchos" y eso es una mecha muy corta si no se maneja bien.