Tchouaméni hace invencible al Real Madrid cuando es titular

El Real Madrid está demostrando que es un equipo muy complicado de ganar. Lo demostró en el Reale Arena venciendo por la mínima a la Real Sociedad con un equipo repleto de rotaciones pensando en la Champions. Sin embargo, Carlo Ancelotti sabe de la importancia que tiene algunos jugadores dentro del equipo para culminar una temporada que rozaría la perfección en caso de doblete en títulos. Entre ellos ha encontrado un amuleto que siempre le ha dado suerte cuando ha sido titular: Aurelién Tchouaméni.

El pivote francés no descansó este viernes y firmó un gran partido a nivel defensivo, yendo al corte para frenar el ataque de los de Imanol pero con el foco de haber sido protagonista en el gol anulado a Take Kubo. Aún así, los merengues volvieron a llevarse el triunfo y las estadísticas empiezan a ser llamativas cada vez que él parte de inicio.

Adaptado en varias ocasiones a tener que ejercer de central, Tchouaméni se ha convertido en un jugador de doble opción que ofrece a Ancelotti más opciones cuando el equipo tiene bajas atrás. Juntando las dos posiciones, el galo suma 36 partidos y 2.649 minutos esta temporada, siendo el séptimo jugador del Real Madrid que más juega de la plantilla. Aunque sus números goleadores son discretos (tres goles y una asistencia), su valor ha sido muy alto, haciendo que los blancos hayan ganado partidos en Las Palmas y Mallorca.

Un muro que Tchouaméni ha levantando

Aún así lo más llamativo es que siempre que ha sido titular nunca ha perdido su equipo. En los dos únicos pinchazos de la temporada, ante el Atlético de Madrid en Liga y en Copa del Rey, el francés empezó desde el banquillo.

Salvo el Arandina, Tchouaméni solo se ha perdido encuentros ya sea por lesión o por sanción, siendo una pieza fundamental en la medular de los esquemas de Ancelotti. Aunque su primera temporada no fue la esperada, el ex del Mónaco ha encontrado la regularidad necesaria para demostrar el potencial que tiene.

Junto con Eduardo Camavinga se intercalan los partidos y han demostrado que pueden jugar juntos en el mediocampo. Es un jugador que comete poco errores y que se ha ganado un papel indiscutible en los partidos grandes de la temporada. Aún restan partidos importante como el de Múnich con el sueño de lograr su primer Copa de Europa, un hazaña que cumplirían los blancos si mantienen la racha de Tchouaméni.