La no convocatoria de Kylian Mbappé con la selección francesa y su participación en los partidos del Real Madrid promete traer cola. Didier Deschamps anunció hace unos días la ausencia del futbolista con Francia para los dos próximos compromisos internacionales en voluntad de "no correr riesgos", algo que Carlo Ancelotti no pareció tener la misma prudencia en el duelo del pasado sábado contra el Villarreal, en el que salió de titular.
Todo ello ha levantado una auténtica polémica en Francia con duras críticas al compromiso de Kylian Mbappé con la selección. Un temporal que Didier trata de sortear de la mejor manera y que ha vuelto explicar en una declaraciones difundidas por la propia selección francesa.
Deschamps insistió en que "no hay caso Kylian". "Los intereses de los clubes y los intereses de las selecciones necesariamente divergen en algún momento y no debemos olvidar que el que tiene contratado al jugador es el club, no la federación. Lo más importante es el interés del jugador. Sé muy bien que no va a ir contra su club y tampoco quiere ir contra su selección", explicó el seleccionador.
"𝘊'𝘦𝘴𝘵 𝘭𝘦 𝘮𝘰𝘮𝘦𝘯𝘵 𝘰𝘶̀ 𝘫'𝘢𝘪 𝘣𝘦𝘴𝘰𝘪𝘯 𝘥𝘦 𝘷𝘰𝘪𝘳 𝘭𝘦 𝘱𝘭𝘶𝘴 𝘥𝘦 𝘫𝘰𝘶𝘦𝘶𝘳𝘴 𝘱𝘰𝘴𝘴𝘪𝘣𝘭𝘦"
Longue interview de notre sélectionneur à retrouver sur YouTube 👉 https://t.co/WQphEwLHnQ pic.twitter.com/oTRRYcmS4I
— Equipe de France ⭐⭐ (@equipedefrance) October 7, 2024
La situación amenaza con debilitar el capital de cariño de los aficionados galos con su estrella, ya dañado por su salida del fútbol francés y sus pobres prestaciones en los últimos partidos, sobre todo en la pasada Eurocopa.
La "prudencia" a la que se aferró Deschamps aparece ahora como una cortina de humo para dar al jugador un tiempo precioso que pueda acelerar su aclimatación a Madrid, donde sus estadísticas, siete goles (tres de penalti) en once partidos, son más vistosas que sus sensaciones en el campo.
Nombrado capitán de los bleus tras la retirada de Hugo Lloris, lo que molestó a Antoine Griezmann, el jugador no ha asumido por ahora ese papel de manera clara y han sido otros los que han impulsado la vida de grupo en el seno de la selección.
Mbappé no se ha vestido con el traje de líder que esperaba Deschamps, que con la reciente retirada de Griezmann del equipo nacional necesita más que nunca líderes naturales, algo que precisa el grupo y que siempre ha buscado el seleccionador.