Jude Bellingham está en Inglaterra con su selección y ha demostrado su potencial como jugador del Real Madrid. Los Three Lions recuperaron el liderato del Grupo 2 y el juego del centrocampista inglés fue la clave para ganar el partido contra Grecia. Este encuentro ha hecho que el número 10 vuelva a brillar en el centro del campo.
Bellingham se estrenó como goleador el pasado fin de semana ante Osasuna en LaLiga. Demostrando que al principio de la temporada no ha sido un jugador clave para el conjunto blanco. De un disparo al palo marcó el 0-2 de Inglaterra en el marcador, como tanto en propia puerta de Odysseas Vlachodimos. El jugador del Real Madrid registró un 84% de aciertos en el pase, dos pases clave, 2/2 regates, 6/10 duelos ganados y recibió cuatro faltas.
El jugador inglés es uno de los ocho madridistas que se han marchado con sus selecciones: Vinicius con Brasil, Brahim con Marruecos, Camavinga con Francia, Antonio Rüdiger en Alemania, Luka Modric en Croacia, Arda Güler con Turquía y Valverde con Uruguay. El siguiente partido en el que podrá demostrar su talento será con Irlanda el domingo 17 de noviembre a las 18:00H.
Jobe Bellingham tiene un gran nivel en el terreno de juego, pero el problema se encuentra en las comparaciones con su hermano Jude. A sus 19 años de edad, el pequeño de la familia ha debutado como titular con la sub21. Su hermano lo hizo con 17 años, pero ya directamente en la selección absoluta. Ambos salieron de la cantera del Birmingham; el Borussia Dortmund pagó 30 millones de euros por el hermano mayor y esta cifra aumentó a 120 millones de euros que pagó el Real Madrid. El Sunderland, por su parte, pagó apenas un millón y medio de euros por Jobe.
"Es un jugador completo y tiene un potencial enorme… Quiere mejorar cada día y sus exigencias son muy altas. A veces sus emociones también están a flor de piel", comentó Le Bris sobre Jobe Bellingham. "Está tratando de crear su propia identidad. No quiere vivir del nombre de su hermano", explicó.