El Real Oviedo presentó las Cuentas Anuales del ejercicio 2018/2019 con un déficit de 54.230 €. La cantidad se ha reducido en más de un 80 % con respecto al ejercicio anterior, pero sigue siendo negativo. Una de las partidas económicas que más llaman la atención de estas cuentas es la relativa a la indemnización de la plantilla deportiva inscribible en la LFP, es decir, las rescisiones contractuales.
Las rescisiones contractuales no se refieren a las llevadas a cabo esta temporada, sino las efectuadas al término de la campaña deportiva 2017/2018. Dentro de este concepto estarían incluidas las cantidades destinadas a dar salida a jugadores entre los que se encuentran: Hidi, Rocha, Aarón Ñíguez, Valentini, Verdés, Cotugno y Pucko. También estaría incluido dentro de este concepto, las cantidades destinadas a indemnizar a Anquela y su cuerpo técnico.
En total la cifra ha ascendido a 442.811 €, 80.000 € más que en la campaña anterior. En contraposición a esto, llama la atención que la cifra total de fichajes sea de 258.000 €. En el ejercicio 2018/2019, el Oviedo ha destinado más capital a rescindir jugadores y cuerpo técnico que en fichar. La cantidad es poco menos que el doble.
Este es uno de los errores a corregir para el futuro, y que permitiría en caso de subsanarse, afrontar los mercados de fichajes con más margen y posibilidades de firmar a los jugadores codiciados.