El Real Oviedo ha caído derrotado contra el Almería en un buen partido que perdió por detalles. La balanza se comenzó a desequilibrar para los andaluces con un penalti inexistente cometido por Arribas sobre Corpas, y se rompió por completo por el fallo de Lunin y Arribas. A pesar de la derrota, el Oviedo sigue fuera del descenso a un punto del Extremadura.
Javi Rozada introdujo varias modificaciones en la alineación, aunque muchas de ellas forzadas por sanciones. Han sido novedades Lunin, Arribas, Luismi, Borja Sánchez y Omar Ramos, en relación con el partido del Málaga. Viajaron 20 jugadores a tierras andaluzas y los dos descartes fueron Alfonso Herrero y Vanderson.
El Almería inició el partido con la intención de hacerse con el dominio de la pelota y el Oviedo buscando la espalda de los defensas en transiciones rápidas. El conjunto carbayón fue el que más cómodo estuvo en los instantes iniciales, merodeando el área de Fernando. Aunque a partir del minuto 10, el cuadro local llevó el partido a sus intereses obligando a los azules a defender muy cerca del área y con las líneas muy juntas.
El equipo ovetense resistió muy bien las embestidas del Almería y no sufrió en exceso. En cambio, el equipo dirigido en los Juegos del Mediterráneo por Javi Benavides, sorprendía a los locales en cada incorporación al ataque. Ortuño tuvo una muy buena ocasión tras un balón al espacio de Omar hacia Bárcenas que forzó a Fernando a salir fuera del área.
La primera parte terminó con el Oviedo en campo rival apretando al Almería y poniendo en dificultades al equipo de Jose María Gutiérrez. Rozada dio con la tecla y supo anticiparse a los movimientos del cuadro andaluz en la primera parte. Los jugadores se marcharon al descanso con el runrún de la grada ante la actuación de su equipo.
La segunda mitad comenzó sin cambios en el Oviedo pero sí en los locales. Al técnico del conjunto almeriense no le gustó su equipo en la primera mitad e introdujo un doble cambio, dando entrada a Corpas y a Kaptoum. El segundo tiempo comenzó con igualdad y ningún equipo fue capaz de llevar al rival a su terreno.
El Oviedo estaba mejor posicionado, pero un penalti muy riguroso de Arribas sobre Corpas le dio la ventaja al Almería. El lanzamiento de la pena máxima se demoró por la revisión del VAR que no modificó la decisión de De la Fuente Ramos. El colegiado no se acercó a la banda a ver la repetición a pesar de que el contacto es casi imperceptible e insuficiente para que el jugador se cayese al suelo. Darwin Nuñez engañó a Lunin y transformó la pena máxima.
Javi Rozada dio entrada a Ibrahima por Omar Ramos tras el gol del Almería buscando más presencia arriba. El Almería dio un paso atrás y el Oviedo asedió el área del cuadro local. Luismi cabeceó al larguero una falta lateral, haciendo realidad la reacción al verse por debajo en el marcador.
En la siguiente acción una falta de entendimiento entre Lunin y Arribas sirvió en bandeja el segundo tanto del Almería. De nuevo Darwin Núñez convirtió el regalo de la defensa del Oviedo. A la desesperada Rozada introdujo a Lolo y a Obeng por Luismi y Bárcenas.
El Oviedo acusó el segundo tanto del Almería y perdió la fe en su capacidad de puntuar en los Juegos del Mediterráneo. El equipo de Guti se encontró cómodo por primera vez en todo el partido, y con menos presión buscó el tercer gol que no consiguió.