El Real Oviedo ha caído en el Anxo Carro ante el Lugo con una primera parte muy preocupante en la que los de Ziganda se mostraron inoperantes. En la segunda parte, los azules reaccionaron y fueron superiores a los gallegos, aunque no supieron trasformar ninguna de las claras oportunidades que tuvieron. Christian y Grippo, vieron cartulina amarilla y no podrán jugar contra el Tenerife.
El primer once del Cuco Ziganda tuvo tres novedades con respecto a la última alineación de Javi Rozada. Fueron titulares Grippo, que debutó con el Oviedo, Coris y Ortuño, en detrimento de Mossa, Sangalli e Ibra. El preparador navarro utilizó de inicio un sistema con dos puntas con Rodri y Ortuño.
El partido comenzó igualado, sin que ningún equipo pudiera plasmar sobre el verde su plan de partido. Los dos equipos tenían muchos nervios y eso se tradujo en las imprecisiones y en las dificultades para combinar. En el primer disparo a puerta, los lucenses consiguieron adelantarse ayudados por un error defensivo del conjunto carbayón. Una falta lejana fue colgada al área y El Hacen remató sin saltar, retratando a Carlos Hernandez.
El equipo de Ziganda no estuvo cómodo en la primera mitad y no supo reaccionar al gol del Lugo, con mucho espacio entre líneas y poca posesión de la pelota. El centro del campo fue inexistente y los balones colgados a los delanteros no fueron efectivos. La primera parte dio la sensación de un equipo sin ideas, repitiendo el despropósito mostrado contra el Alcorcón.
Tras el descanso, el Oviedo salió con un cambio de actitud y de juego. Entró a la segunda parte decidido a buscar el empate, con la defensa más adelantada y con más presencia por banda. Claro ejemplo de ello fue un gol anulado a Rodri por fuera de juego tras una gran jugada de Nieto. Sangalli, que entró al partido por Coris, revolucionó el partido y generó dudas a la defensa del cuadro gallego.
El impulso inicial del Oviedo se frenó un poco y Ziganda intentó reanimarlo con un cambio en la delantera con la entrada de Ibra y la salida de Ortuño. El Lugo pasó a formar con un defensa con cinco integrantes para intentar frenar las embestidas del Oviedo, cediéndole la pelota a los azules. Los carbayones generaron mucho peligro a balón parado rematando en diversas ocasiones y salvando Cantero o los defensas sobre la línea de gol.
Con la derrota, el Oviedo complica su situación clasificatoria y se hunde en el descenso. En función del resultado del Extremadura, los de Ziganda podrían quedar relegados a la penúltima posición. La salvación quedaría a cuatro puntos, aunque el Albacete tiene un partido menos. El Lugo le ha ganado el golaveraje al Oviedo y le aventaja en la tabla en tres puntos.