El Martes de Campo es una fiesta en la ciudad de Oviedo desde el siglo XIII. Se lleva celebrando de manera ininterrumpida desde el fin de la Guerra Civil española y este año, la expansión del COVID-19 ha obligado a cancelar. Por lo que el próximo 2 de junio, será festivo en Oviedo pero la tradición va a estar ausente.
El origen y el significado de esta celebración se remonta al año 1232. Velasquita Giráldez, una dama con poder económico, dejó parte de su herencia a la Cofradía de los Alfayates a cambio de una misa anual desde el momento de su fallecimiento. Desde su fallecimiento nunca se ha incumplido la celebración de la Eucaristía. Los feligreses iban en procesión desde la Capilla de Nuestra Señora de la Balesquida (Plaza de la Catedral), hasta Santa Ana de Meixide (actual Montecerrado). Al terminar, la Cofradía ofrecía un bollo de pan de fisga con un torrezno de jamón frito y medio cuartillo de vino.
El avance imprevisible de la pandemia, unido a la incertidumbre de cuando remitirá, ha obligado a la Sociedad Protectora de La Balesquida a suspender los actos programados en Oviedo para este 2020. Unos eventos que tenían un carácter especial por cumplirse 90 años de la creación de la Sociedad. Se ha decidido poner fin a todas las actividades previstas entre las que se encuentra la popular entrega del bollo y vino.