A recuperar el ritmo antes de visitar a un Numancia tocado y casi hundido

La plantilla del Real Oviedo ha vuelto al trabajo tras el empate sin goles de este jueves ante el CF Fuenlabrada. Con tiempo por delante, los hombres de José Ángel Ziganda ya piensan en su próximo compromiso, el próximo domingo ante el CD Numancia en el estadio de Los Pajaritos. Un duelo trascendental ante el equipo que marca la zona de descenso con tres puntos menos que los carbayones y la peor racha de un equipo en la categoría en este 2020.

El Cuco Ziganda ha programado un entrenamiento, con trabajo de gimnasio y recuperación para los jugadores que más minutos disputaron en la visita del Fuenlabrada al Carlos Tartiere. Mientras que el resto de los efectivos de la plantilla azul han trabajado a una mayor intensidad, al que trabajará todo el equipo este sábado desde las 10.00 horas, cuando los carbayones completarán el último entrenamiento de la semana, para después iniciar por carretera su desplazamiento a Soria.

El Numancia está herido y es el momento para rematarlos. No han sumado ni un solo punto desde que se retomara el campeonato tras la crisis sanitaria provocada por la epidemia del coronavirus, y en total son siete derrotas consecutivas y hasta 11 partidos sin ganar. No lo hace desde el pasado 18 de enero, cuando se impuso por 2-0 al eterno rival del Real Oviedo, el Sporting de Gijón. Desde entonces, los rojillos apenas han sumado dos puntos de 33 posible. Una oportunidad de oro.