El entrenador del CD Castellón, Óscar Cano, indicó que su próximo rival, el Real Oviedo, es un equipo muy físico y muy poderoso, pero matizó que deben centrarse en el potencial de sus propios jugadores, y no temer a nadie para imponerse en el partido.
"Es un equipo muy poderoso, que, si les dejas llegar por fuera te invaden bien el área, y, sobre todo, también tienen un gran peligro a balón parado. Es un partido muy difícil, pero tenemos que empezar a considerar que somos un equipo que no tiene que temerle a nadie", explicó en la rueda de prensa previa al partido del domingo.
Cano destacó que su rival "está construido para estar en play off", con una plantilla que cuenta "con centrales muy poderosos, a la par que jugadores como Nahuel Leiva, Borja Sánchez o Marco Sangalli en los extremos y jugadores con los que domina el área como Blanco Leschuk".
Sobre la dinámica de resultados de su equipo, que lleva cinco derrotas seguidas, el entrenador del Castellón indicó que el objetivo que es conseguir 50 puntos, pero que todavía quedan muchos partidos para conseguirlos.
"Es cuestión de que llegue, a cada uno de los rivales a los que nos enfrentamos los ponemos contra las cuerdas, somos capaces de exigirles mucho mas de lo que le exigen otros equipos. Hay confianza en los chicos y tranquilidad en lo que hacemos", añadió.
Cano añadió que deben de construir el juego en base a las características de sus jugadores, y que para él no tendría ningún sentido jugar directo, porque las veces que lo hemos hecho ha estado mucho más cerca el rival de cerrar definitivamente el partido que ellos de empatar o ganar.
"No tenemos que creernos que la derrota es definitiva ni que la victoria es definitiva. Espero que todo eso que hacemos bien tenga su recompensa. Tengo confianza plena en lo que hacen los jugadores, porque los veo día a día y es una maravilla ver al equipo entrenar y exigirse", concluyó.