El Real Oviedo se midió a la SD Eibar en el partido correspondiente a la jornada 14 de LaLiga SmartBank. Un duelo que se saldó con una cruel derrota por 1-0 en el tiempo de descuento. José Ángel Ziganda rotó en la parcela ofensiva para dar descanso a algunos de sus jugadores más determinantes. Y lo cierto es que no dieron resultado y el equipo mejoró en la segunda parte con los cambios. Eso sí, faltó lo de siempre: la definición.
Y es que el Oviedo salió a tener la pelota. Los carbayones aglutinaron la posesión y la distribuyeron con velocidad sobre el césped de Ipurua. De hecho, en los primeros diez minutos tuvieron varias ocasiones para adelantarse. Desde una en las botas de Jirka, desviada por la defensa a córner, hasta un cabezazo de Matheus Aiás en la jugada posterior que envió a las manos de Yoel.
No obstante, poco a poco el cuadro alfarero se asentó, recuperó la pelota e intentó transitar por fuera con velocidad. Quique González dejó un centro desde la izquierda que a punto estuvo de rematar el excarbayón Blanco Leschuk, pero no le llegó la pelota. En el resto de la primera parte, lo cierto es que no hubo ocasiones de verdadero peligro.
Ya en la segunda parte, el cuadro eibarrés salió con mayor intensidad de vestuarios. Estando en casa, no les quedaba otras. Eso sí, el nivel defensivo del cuadro carbayón fue óptimo. Eso sí, Ziganda (al que normalmente, y con cierta razón, se le critica que tarda en hacer los cambios) decidió mover el árbol en el minuto 54. Entraron Pombo y Borja Bastón en sustitución de Jirka, impreciso, y Matheus, voluntarioso pero sin presencia en el área.
De hecho, ambos dejaron su sello en el partido desde su entrada. El zaragozano se colocó en la izquierda y la pidió continuamente. Tiró de carácter y dribló, centró, arrancó la motocicleta y dejó mucho peligro, bien como revulsivo. De hecho, de una jugada suya surgió una de las ocasiones más peligrosas, que acabó en el disparo de Lucas Ahijado a las manos de Yoel. Otra de ellas fue un centro-chut tocadito desde la frontal que Jimmy no llegó a rematar, pero se topó con el palo.
Eso sí, ni la escandalosa exhibición de Jorge Pombo pudo evitar el cruel destino. Y es que, cuando se avecinaba el final, Joan Femenías dejó un despeje en boca de gol y Exteita lo remachó en el último suspiro. En resumen: un Real Oviedo dominante y ofensivo, muy superior al Eibar, cayó por el único error defensivo que cometió. Eso sí, que el resultado no nuble el juicio: en Ipurúa vimos al mejor Oviedo de lo que va de temporada.
Me gustaría saber, si alguien me lo puede explicar, porque un agarrón de la camiseta en el centro del campo es falta y tarjeta y sin embargo dentro del área no es nada....a ver si cuando es el Oviedo el que lo hace pasa también, por otra parte cuando piensa la directiva hacer una protesta formal por el VAR? Porque no es lógico que los agarrones del Eibar ni los consulta y sin embargo un despeje de la defensa del Oviedo rápido lo consulto, en fin otra tomadura de pelo arbitral y van ... Por otra parte para cuando el cambio de portero? No son ya suficientes los puntos perdidos por Femenias?