Nahuel Leiva ya ve la luz al final del pasado túnel. Pese a quedarse en el banquillo en la victoria del Tenerife ante el Sporting de Gijón, el argentino ya tuvo minutos en la contundente derrota de su equipo la pasada jornada ante el Valladolid. Era el primer partido que el ex del Real Oviedo disputaba desde el pasado 24 de mayo, cuando sufrió una lesión en el encuentro que enfrentaba, precisamente, al conjunto carbayón con el Mirandés.
Pese a la distancia, Nahuel sigue muy de cerca la temporada del Real Oviedo, que asiste desde la actual séptima posición a la gran temporada del Tenerife, que es cuarto con 55 puntos, 11 más que los carbayones y a solo cuatro de los puestos de ascenso que marca el Almería. El argentino no volverá esta temporada al Carlos Tartiere, ya que la visita de los chicharreros en agosto le pilló en plena lesión, pero lo haga cuando lo haga, se le recibirá con las puertas abiertas.
Una vez finalizada su cesión al Real Oviedo, Nahuel se despidió de forma sentida del club y la afición, dejando la puerta abierta a un posible regreso en el futuro: "Simplemente GRACIAS, Real Oviedo, GRACIAS, oviedistas. Orgullo, valor y garra", señalaba en un post de Instagram, a lo que añadía una publicación en sus historias: "Ahora nuestros caminos se separan, y ojalá en el futuro nos volvamos a encontrar. Desde la distancia os seguiré apoyando. ¡Orgullo, valor y garra!".