Además de despedirse y dar explicaciones sobre su marcha, el ya exdirector deportivo del Real Oviedo Rubén Reyes ha confirmado que ha dejado cerrado al primer refuerzo del mercado de fichajes para la nueva temporada carbayona en LaLiga SmartBank.
Se trata del francés Quentin Braat, portero del Chamois Niortais de la segunda gala, que ya estuvo en Oviedo a finales de marzo formalizando su contrato con el club azul.
Rubén Reyes ha explicado que el jugador tiene "unas condiciones bárbaras y ficharlo ha sido mérito primero de nuestra secretaría técnica que lo encontró, y luego del club que hizo posible el poder cerrarlo. Creo que el Real Oviedo puede tener tres porteros y es tarea del club valorar ahora cómo queda la portería del filial también, si alguno ha quemado etapa o puede quedar de tercer guardameta".
Reyes deja atada así una de las posiciones en las que más dudas había sobre las continuidades en este mercado de fichajes, ya que el portero titular, Joan Femenías, finaliza contrato este mismo verano y el suplente, Tomeu Nadal, tiene un año más firmado a pesar de no haber llegado ni a debutar esta temporada.
El guardameta francés, de 24 años y 1,94 de envergadura, ha jugado 26 partidos de 38 posibles en liga regular y finaliza su contrato este verano tras encajar 27 goles y firmar diez puertas a cero esta campaña.
La de Braat es la única llegada que deja cerrada un Rubén Reyes que, en once meses al frente de la dirección deportiva, logró encarrilar todas las renovaciones que se propuso a excepción de una, la de Borja Sánchez.
"La renovación de Borja es lo único que no he podido conseguir. La perdí yo, en lo personal, pero espero que la logre cerrar el club. Es un orgullo de jugador para todo el oviedismo, siente este equipo y creo que debe quedarse", ha asegurado respecto al canterano, objeto de deseo también de clubes de Primera.