El Real Oviedo venció al Lugo el pasado domingo gracias a los goles de Sergi Enrich y Manu Vallejo. Pero lo más destacado fue el homenaje al cuerpo de bomberos que, sin descanso, ha estado luchando contra los múltiples incendios que llevan asediando el Principado de Asturias en los últimos tiempos.
El club permitió que uno de los miembros de esta institución hiciera el saque de honor antes del inicio del partido. Mientras todo el estadio aplaudía a sus héroes, se respiraba un aire de desesperación entre cada aplauso, ya que, como se ha repetido en varias ocasiones, "Asturias no arde, la queman".
En un partido donde lo importante parecía ser el duelo que protagonizaban Oviedo y Lugo, la situación que vive la comunidad oscureció el duelo. Mientras las llamas siguen devorando Asturias, los trabajadores del cuerpo de bomberos no cesan en su empeño de apagarlas.
La tarea está siendo difícil, ya que los focos superan los 115 y, desgraciadamente, han provocado que muchas familias se vean obligadas a abandonar sus casas. La dificultad no solo viene por el viento, el cuál esta complicando mucho el trabajo, sino por el origen del fuego que, como se ha demostrado, es causado por varios pirómanos.
Tras dar varias muestras de apoyo, junto con el Sporting, el club oviedista protagoniza, así, el enésimo gesto de cariño y apoyo a esos héroes que intentan por todos los medios salvar a una región que llora entre las llamas pidiendo ayuda porque, como ya hemos dicho, Asturias no arde, la queman.
Al menos, el fútbol sigue cumpliendo con su función, abstraer a la gente de la dura realidad y darles un poco de felicidad, que con la victoria por dos a uno, el Carlos Tartiere disfrutó.
Nuestros héroes 🙌🏻💙#RealOviedo 🔵⚪️ pic.twitter.com/9J4OjAwVUw
— Real Oviedo (@RealOviedo) April 16, 2023