Las notas del Real Oviedo: aprobados y suspensos en un partido marcado por la polémica arbitral

Apostando por Santi Cazorla como única novedad respecto al equipo que derrotó a Huesca y Zaragoza, el Real Oviedo cayó frente al RCD Espanyol en la primera de sus tres finales por el ascenso a LALIGA EA Sports. Un partido señalado por el polémico gol anulado a Dani Calvo por un milimétrico fuera de juego de Alemao y donde los carbayones dieron una buena imagen en líneas generales.

En ElDesmarque ponemos nota a su actuación en el StageFront Stadium.

Leo Román (4): Señalado en el 2-1, no entiendo qué intentó hacer. Hasta entonces se había mostrado bastante seguro por alto e impreciso con el balón en los pies.

Viti (5): Pura energía, pero quizás estuvo algo pasado de revoluciones. Tapó bastante bien su banda, eso sí.

Oier Luengo (7): El gol de cabeza fue el broche perfecto a un buen partido. Le tocó bailar con Braithwaite al que secó y llevó al límite. En la acción del 2-1 se le escapó la marca de Cabrera lo suficiente como para que acabase marcando, pero no es el principal culpable.

Dani Calvo (7): Igual que su compañero de zaga, el tanto anulado habría redondeado su excelsa actuación. Imperial por alto, despejando los incontables centros laterales con los que percutió el Espanyol.

Pomares (6): Sigue en un buen estado de forma. En partidos como este es una alternativa más que válida porque 'guarda la ropa' un poco más que Abel Bretones. Se prodigó en ataque lo justo y necesario, pero sacó centros muy peligrosos que supusieron ocasiones.

Colombatto (4): Mal partido del argentino, más allá del penalti que cometió sobre Keidi Bare. Impreciso en la salida de balón, con errores impropios de él y bastante gris.

Seoane (7): Enérgico, vertical y aportándole soluciones al equipo a base de puro tesón. Bien en las disputas y bastante preciso en la distribución de juego.

Masca (4,5): Regresó a la banda derecha. Marcó un gol de cabeza en los primeros minutos que le anularon por fuera de juego y tuvo otra ocasión clarísima, también en un testarazo, pero se diluyó como un azucarillo.

Cazorla (8): ¿Cómo no iba a jugar un partido de tanta trascendencia? No absorbió tanto balón, pero su impacto fue mayúsculo: Dio oxígeno al juego carbayón y asistió a Oier Luengo. Pudo completar un partido perfecto si la asistencia que le dio a Dani Calvo hubiera contabilizado.

Borja Sánchez (4,5): Había ganas de verle junto a Cazorla, pero su presencia quizás minimizó mucho su impacto en el juego. Bastante gris y poco participativo.

Alemao (4): De este partido se recordará el milimétrico fuera de juego que le señalaron en la disputa con Brian Oliván. Es un delantero bastante autónomo, que se fabrica muchas ocasiones y que tuvo un par de buenas acciones en zona de tres cuartos. Pero no fue suficiente.

Los suplentes del Real Oviedo

Paulino (4): No tuvo la chispa de otros partidos en los que ha actuado de revulsivo.

Dubasin (5): Entró como segundo punta. Participó poco.

Abel Bretones (s.c.): Sustituyó a Pomares, que acabó agotado. Nulo impacto.

Borja Bastón (s.c.): Fijó a los centrales y poco más.

Álex Millán (s.c.): Entró porque Carrión quería acumular hombres arriba para buscar el empate a la desesperada.