Once años después, el Real Oviedo visita Ipurua este domingo con un ascenso en juego. Pero espera y confía en que el resultado no sea el mismo que la última vez. En ElDesmarque charlamos con uno de los jugadores que disputó aquella eliminatoria por el ascenso frente al conjunto armero en 2013: Galder Cerrajería.
El centrocampista de Barakaldo, que está sin equipo pero confía en reengancharse al fútbol para la próxima temporada, repasa su etapa como carbayón. Y es que su relación con Oviedo ha estado muy presente en toda su carrera. Compartió vestuario con Diego Cervero o Saúl Berjón y también con dos miembros de la actual plantilla: Borja Bastón y Carlos Pomares.
P: Se dice que hace mucho frío de Lezama. Pero saliste y te fuiste a un equipo como el Murcia, en Segunda División, y después al Oviedo. ¿Qué equipo te encontraste?
R: "Pues un equipo que estaba en una situación bastante mala, pillé a un equipo que estaba en Segunda B y no se sabía si iba a salir a competir. Había problemas económicos y eso hizo que el grupo se uniera mucho más. Para mí, si no fue mi mejor experiencia, fue de las mejores.
Se dice que Oviedo es una ciudad tan grande y que pasan tantas cosas que parece que a veces se come a los jugadores. Pero la presión que había ahí y la manera de vivir el fútbol me gustaba muchísimo. Se vivía con una intensidad brutal. Cuando perdías, evidentemente, era una semana complicada, pero no cambio nada de lo que viví en Oviedo. Jugar en un equipo como el Oviedo, sea en Tercera, Segunda B o Segunda es un subidón. No conocía cómo era aquello, pero cuando fui allí me hicieron sentir como un jugador de Primera División.
Encima caí de pie, porque hice la pretemporada con Bielsa, me metieron mucha caña y llegué muy bien de forma. Fue un año casi perfecto, nos eliminó el Eibar que ascendió a Segunda y luego a Primera. Si hubiésemos ascendido hubiese sido ya el colofón perfecto".
P: ¿El objetivo que os trasladaba el club era ascender aunque hubiese tantos problemas económicos?
R: "Ya no es el club, es la afición. Ellos al final se han visto jugando UEFA y cuando los equipos grandes caen a Segunda B o a Tercera, el objetivo siempre va a ser subir, como pasa con el Dépor o el Málaga. Solo por el escudo tienes que ascender. Y estuvimos cerca. Pero nos cruzamos con el Tenerife, el Leganés... Un grupo complicado. Se nos escapó el liderato y jugamos contra el Albacete, que tenía un equipazo. Y contra el Eibar, en la ida estuvimos bien y en la vuelta nos pasó por encima. Era un equipo mejor que nosotros y no pudimos hacer nada.
Fue una pena. Si hubiésemos ascendido me hubiera quedado dos o tres años más. Estaba súper a gusto y me sentía muy valorado, la gente me quería mucho. Es la mejor o de las mejores experiencias que he tenido".
P: Teníais un plantillón. Estaba Mantovani...
R: "Sí, y Manu Busto, Cervero, Xavi Moré... Había buena plantilla, aunque había meses que fueron complicados porque el tema del pago también estuvo complicado. Yo veía que el equipo estaba muy bien y que llegábamos bien a la última fase de la temporada. Y creo que si nos hubiésemos encontrado con otro rival que no fuese el Eibar, hubiéramos ascendido".
P: Creo que la grandeza de un equipo como el Oviedo se ve cuando juegas en campos más pequeños. Suelo decir que parece que 'el circo viene a la ciudad' y te tocó vivir eso, ¿no? Ir a jugar a Astorga, o a Mieres, ver el campo lleno y toda la gente encima.
R: "Evidentemente, sabes que cuando juegas en un equipo como el Oviedo fuera de casa, el rival va a dar el cien por cien. Para ellos era el partido del año. No es falta de humildad, porque el Oviedo está obligado a ganar en todos los campos y los rivales siempre te quieren ganar. Además ese año nos tocó un grupo con muchos asturianos, hubo muchos derbis... Y para el rival es el partido del año, suelen hacer el día del socio. Y eso nos pasó en más de un partido, que no entrabas al campo al cien por cien eran campos complicados donde ganar.
Había que ganar en Luanco, en Mieres... Encima tuvimos un tropiezo con el Sporting B, que ya es un partido que de por sí la afición no quiere jugar, y nos ganaron en El Molinón".
P: ¿No fue aquella goleada famosa verdad? Eso fue al año siguiente.
R: Es que hubo dos temporadas que perdimos. Un año creo que fue un 1-4 en el Tartiere, pero el año que estuve yo perdimos 4-1 en El Molinón. Ese partido me lo perdí porque estaba sancionado. Nos marcó Guerrero los cuatro goles, el contrato de profesional se lo hicimos nosotros (risas).
Fue una semana terrible, aquello no voy a decir que fue una vergüenza, pero sí que fue el peor día del año, porque mínimo tienes que sacar un punto. Qué mal lo pasamos aquella semana... Menos mal que al siguiente partido, con el Avilés, ganamos".
P: Y ahora, casualmente, el Eibar se vuelve a topar en el camino del Oviedo en el camino al ascenso.
R: "Este tipo de cosas siempre se repiten, es curioso. Va a ser un partido espectacular, porque el Eibar viene de pinchar y el Oviedo de ganar. Ya me gustaría ir a Ipurua a verlo. Les deseo lo mejor a los dos, porque son dos equipazos, sobre todo el Oviedo, que cuando cambió el míster empezó a jugar de otra manera y me consta que están encantados con el año que están haciendo.
Si tengo la oportunidad de ir a ver el play off en el Carlos Tartiere iré, porque es una ciudad que me encanta y en la que dejé muchos amigos".
P: El otro día dijo Luis Carrión que la afición tenía que quitarse de encima la negatividad. ¿Tú que has vivido el club desde dentro lo compartes?
R: "Desde que el Oviedo está en Segunda el objetivo es ascender otra vez o, por lo menos, jugar play off. Cuando llevas tantos años y ves que no llegas nunca, lo negativo siempre supera a lo positivo. Creo que el Oviedo va a revertir esta situación y seguramente sea porque hay nervios y cada detalle te puede costar muy caro. La afición ha vivido situaciones muy complicadas desde que descendieron de Primera División y entiendo que la gente esté nerviosa.
Pero el equipo está en una buena dinámica y creo que, si va con una mentalidad positiva puede rascar algo en Ipurua. Evidentemente juegas contra un Eibar que es muy potente, pero yo les veo como candidatos a ascender".
P: Parece que el Oviedo ha marcado tu carrera. Luego volviste a coincidir con Diego Cervero.
R: "Sí, en Miranda. A Cervero le considero uno de mis mejores amigos en el fútbol. Cuando fui a Sevilla a ver la final de Copa le visité en Sanlúcar, en el hospital. Está ahí de médico y juega con el filial del Sanluqueño de vez en cuando. Cuando puedo, quedo con él. Es un tío muy peculiar, lo más grande que he visto yo en un vestuario".
P: Es un personaje eh.
R: "Sí, sí. Si te dice que te pegues contra la pared, allí que vas tú porque confías en él al cien por cien y nunca te va a fallar. Gente así es complicada de encontrar. Es un tío especial y un poco excéntrico, pero es una pasada de jugador. Aquí en Barakaldo lo demostró, vino para unos pocos partidos y salvó al equipo con sus goles".
P: Sí, estaba yo en la directiva en aquél momento.
R: "Fuera del área no le pidas más. Pero dentro del área, al primer toque, y lanzando penaltis es de los mejores delanteros con los que he coincidido. Y una persona de diez".
P: Con Saúl Berjón también coincidiste en Burgos.
R: "Otro que también... Menudo artista (risas). Joder, qué bueno era. Amigo mío también de Oviedo, me preguntó para ir a Burgos. Tenía dudas, porque igual no se reenganchaba a Segunda si bajaba a Segunda B y le dije que no tuviera dudas, porque teníamos muy buen equipo. Y al final fue clave en Extremadura, metió el gol al Bilbao Athletic y ascendimos. Me da pena que no siga jugando al fútbol, porque le sigue quedando tralla. El otro día estuve hablando con él, al final me quedo con los amigos".
P: Hace diez años el Eibar os fastidió un ascenso... ¿Ahora toca devolvérsela?
R: "No estaría mal devolverla. Yo confío en el Oviedo. De los que está arriba, es el que mejor dinámica lleva, porque el Racing también pinchó el otro día, y uno de los que en mejor forma está. Si puedes dejar a gente como Borja Bastón en el banquillo es porque tienes una plantilla muy buena. Les estoy viendo jugar muy bien, en Segunda es de los equipos más atractivos de ver y ojalá ascienda. Se lo merecen porque llevan muchos años sufriendo en Tercera, Segunda B y Segunda y el Oviedo tiene que estar en Primera División".