El estreno de Anoeta tras su remodelación vive las últimas horas de su cuenta atrás. Tras el visto bueno de la LFP al nuevo césped, el sistema de iluminación, la megafonía y el videomarcador este jueves ha sido el turno del VAR. El sistema de videoarbitraje implantado esta temporada en Primera División ha sido utilizado por primera vez en el estadio a modo de prueba en un partido entre jugadores de las categorías inferiores del club txuri urdin.
El viernes será el turno de los futbolistas. Asier Garitano y sus hombres entrenarán sobre el césped de Anoeta en la que será la primera toma de contacto con su renovado hogar antes de recibir al FC Barcelona el sábado a partir de las 16.15 horas. Será el primer partido que el equipo donostiarra jugará en casa sin pistas de atletismo desde 1993.
Ese día la Real utilizará el nuevo fondo sur y las tribunas laterales altas, que se mantienen intactas, así como las bajas, de nueva construcción, mientras que no se podrá usar el fondo norte, que aún debe ser demolido y reconstruido. Las obras finalizarán definitivamente dentro de algo más de un año.
Los trabajos de reforma de Anoeta, que costarán 50 millones de euros, significarán un incremento de aforo de los casi 30.000 espectadores actuales a los 42.000, aunque el próximo 15 de septiembre habrá sitio para 28.000 aficionados.