El derbi como salvavidas
No hay partido que motive más que el derbi. Sin duda hay picos más altos que escalar y éxitos más grandes que alcanzar, pero el derbi, se diga lo que se diga, es eso, el derbi. Y este primero de la temporada ante el Athletic (viernes, 21.00 horas, San Mamés, Gol) llega en muy mal momento para los dos. Ni Real ni Athletic están demostrando ser aspirantes a los puestos dignos de la clasificación, y en el caso de los de Asier Garitano hay que añadir además una larga y preocupante plaga de lesiones y su deficiente trayectoria en Anoeta, donde apenas ha sumado un punto en tres partidos. El derbi es el salvavidas, porque tiene que servir de punto de inflexión. Todas las dudas se van con el ambiente. Todos los problemas acaban con el pitido inicial. Después de eso, 90 minutos de fútbol. Y ahí ya no hay circunstancias ni excusas. Ahí ya solo vale jugar y ganar.
De momento no tenemos pista alguna para conocer los planes de Garitano, ya que el técnico txuri urdin ha preferido dejar la convocatoria definitiva para los momentos previos al encuentro. Lo que sí está clara es la larguísima lista de jugadores con los que no puede contar. Juanmi cumplirá el último de los tres partidos de sanción que arrastra por su expulsión en Huesca, mientras que a Theo todavía le quedará otro más. Y Garitano tiene cinco hombres en la enfermería sin posibilidad de recuperar a ninguno a corto plazo: Llorente, Zaldua, Merino, Merquelanz y Januzaj, a los que hay que sumar a Guridi y Concha, de momento sin dorsal del primer equipo. Es obvio que en la convocatoria estarán todos los disponibles de la primera plantilla, dieciséis, más tres potrillos que saldrán de entre el grupo de los que han trabajado durante la semana: Le Normand, Lapeña, Guevara y Roberto López.
Salvo sorpresa mayúscula, serán los quince del primer equipo los que lucharán por formar parte del once inicial en San Mamés. Da la impresión de que Moyá tendrá continuidad bajo palos y en defensa no parece haber más alternativa que la formada por Aritz Elustondo y Kevin Rodrigues en los laterales y Héctor Moreno y Navas como centrales. Con la ausencia de Merino, da la impresión de que el centro del campo lo formarán Zubeldia, Illarramendi, Pardo y Zurutuza, con Oyarzabal y Willian José en punta. No sería nada descabellado que Sandro entrara, bien por Oyarzabal o bien retrocediendo su posición y entrando por uno de los cuatro centrocampistas mencionados. De los jugadores sanos que quedan en la primera plantilla, Rulli, Gorosabel, Sangalli y Bautista son los que menos opciones parecen tener.
Los dos equipos llegan al derbi en tierra de nadie. La Real es decimotercera con ocho puntos, a la misma distancia de Europa que del descenso, tres puntos, y el Athletic, aunque con un partido menos, es decimoquinto con siete puntos. Es peor local el Athletic que visitante la Real. Los de Garitano han ganado dos de los cuatro partidos que han jugado a domicilio, 1-2 en Villarreal y 0-1 en Huesca, y solo cayeron derrotados por 2-1 ante el Eibar. Los de Berizzo, en cambio, han dejado escapar puntos en tres de sus cuatro encuentros en San Mamés, empates a dos ante el Huesca y a uno ante el Real Madrid y derrota 0-3 ante el Villarreal, y no ganan en su estadio desde la primera jornada. La Real ha marcado en todos sus partidos como visitante y el Athletic ha encajado en todos los que ha jugado como local.
Si la estadística y la historia jugaran, el Athletic tendría ventaja. De los 71 derbis que ha disputado como local, siempre en Primera División, 38 se han saldado con victoria del equipo bilbaíno, mientras que Real ha arrancado 13 victorias y 20 empates. La victoria txuri urdin más amplia sigue siendo el 1-4 de la temporada 1987-1988, con dos tantos de Begiristain, uno de Loren y otro más de Bakero. El Athletic nunca ha conseguido superar el 7-0 que logró subir al marcador en la temporada 1934-1935. Desde el último ascenso de la Real hay números mucho más igualados. El conjunto donostiarra ha puntuado en cinco de los derbis disputados desde 2010 en Bilbao, con dos victorias y tres empates, cayendo derrotado en las tres ocasiones restantes, y solo ha perdido uno de los últimos cinco, el 3-2 de la temporada 2016-2017.
La pasada temporada, la 2017-2018 Athletic y Real empataron a cero en un partido insulso y con muy pocas ocasiones de gol. Las más claras de la primera mitad, en los pies de Oyarzabal y San José, ni siquiera encontraron portería. Para ver acciones de mérito de los guardametas hubo que esperar a la segunda parte. Raúl García tuvo la más clara de los robiblancos, cuando forzó una buena estirada de Rulli para despejar el balón a córner repeliendo una buena volea. Por parte de la Real, que pareció estar mejor en los últimos minutos, cuando la lluvia ya arreciaba sobre San Mamés, Januzaj mandó una buena ocasión al lateral de la red y Xabi Prieto, rematando al vuelo una falta con su pierna derecha pudo sorprender al meta local, pero este reaccionó bien y despejó su disparo. Tablas en el juego y en el marcador.