Los Reyes Magos no se olvidaron de la Real. Gracias. ¡Qué partido! ¡Qué puntazos! ¡Qué alegría! Imanol logró que la Real mostrara otra cara, y en la segunda parte los donostiarras consiguieron hacer vulgar al Real Madrid en su propio campo.
En la primera parte se sufrió, en la segunda se comieron a los de Solari. Aihen debutó, Willian marcó y Pardo 'resucitó'.
La Real no solo sobrevivió al Bernabéu, se hizo grande en Madrid. Algo ha pasado para los jugadores gipuzkoanos hayan dado una cara que no se vio antes. Pero eso ya es cosa del pasado y hay que mirar adelante. Y si la actitud es la vista este domingo aún queda tiempo para ilusionarse.
La crisis de los blancos que la analicen los demás. Habrá quien diga que los madrileños perdieron el partido, pero lo cierto es que la Real supo hacerlo mejor. Y ahora a seguir trabajando. Queda mucho por delante. Pero hoy es día para disfrutar. 2019 no podía empezar mejor...
Cuando todavía se estaban sentando los aficionados más rezagados, una perdida de balón de Marcelo la aprovechó la Real para salir a la contra. Merino se internaba por la banda, en principio sin excesivo peligro, cuando Casemiro le derribó de forma tan clara como absurda, y el colegiado decretó penalti. Primer regalo de Reyes del día que Willian José no desaprovechó y envió al fondo de las redes, para romper así su sequía goleadora desde septiembre.
Uno de los principales cambios de esta Real de Imanol se vio en que los txuri urdin volvían a presionar arriba y dificultaban la salida del balón jugada desde atrás por los de Solari.
El segundo regalo llegó en el minuto 9 y lo protagonizó Benzemá. El francés falló una ocasión en la que era más fácil tirarla fuera que dentro, pero afortunadamente el de La Plata cubrió bien la portería y el delantero galo cruzó demasiado la pelota, que se marchó fuera.
Tras el ímpetu inicial, los blancos comenzaron a llegar con más claridad a la meta defendida por Rulli. Algunas imprecisiones en defensa y un Illarramendi bastante solo en el mediocampo permitían que el Real Madrid merodeara cada vez más el área realista. Los locales rompían líneas muy fácil y la Real apenas veía el balón. Faltaba contundencia.
Rulli salvó a la Real del empate en el minuto 21 con una gran parada a disparo de Modric. Desde el tanto de Willian José, los de Imanol apenas habían vuelto a generar peligro ante la meta de Courtois. Con el marcador a favor y la presión de la afición hacia el conjunto blanco, la Real no conseguía aprovecharse de la situación y el balón duraba muy poco.
En el minuto 26 los gipuzkoanos al menos consiguieron volver a asustar un poco a los blancos, cuando Aihen metió un buen pase a Januzaj, y el centro del belga terminó en saque de esquina.
La pena es que la Real esta temporada no está sabiendo sacar provecho de los córners, por lo que es una de las asignaturas pendientes sobra las que tendrá que incidir el oriotarra"
Otra cosa difícil de entender. ¿Por qué complicarse la vida en el Santiago Bernabéu? En repetidas ocasiones los donostiarras querían pasarse demasiado el balón en lugar de despejar la pelota. Y así puedes liarla más de una vez. A veces el patadón, y más en un campo así, puede resultar hasta más estético que una perdida con consecuencias fatales...
Insistía el Madrid y sufría la Real, que no salía del área. Sin embargo los madrileños bajaron un poco su insistencia en ataque con el paso de los minutos. La Real seguía encerrada a pesar de ello y a Courtois no se le había vuelto a ver. Había que creer y confiar que a medida que avanzaba el crono los blancos comenzaran a ponerse nerviosos, al igual que la afición madridista.
A punto de alcanzar el minuto 45 un centro chut de Lucas Vázquez pegó en el palo. Los blanquiazules evitaron el empate psicológico, ya que un minuto después se llegó al descanso con esa ventaja del 0-1 en el marcador. ¡Qué largo se veían el segundo tiempo!
La Real logró un saque de esquina tras la reanudación pero se botó sin consecuencias. Y a renglón seguido los gipuzkoanos se salvaron del 1-1 tras una serie de rechaces dentro del área y que primero Willian José y luego Rulli lograron despejar. Buen partido del argentino que realizó grandes intervenciones.
El segundo tiempo empezó eléctrico. Y es que sin apenas respiro los de Imanol volvieron a tener otra gran ocasión para ampliar el marcador, pero Oyarzabal de primeras chutó y pegó en un defensa, y en el rechace la lanzó fuera. Sin tregua Vinicius caracoleó dentro del área, chuta con la derecha buscando la colocación y la pelota se fue fuera por poco. El ritmo no paraba y le tocó a Januzaj que tras irse en velocidad golpeó el balón desde fuera del área, y el esférico se marchó fuera lamiendo el poste. Ocho minutos en los que había pasado más que en todo el primer tiempo.
La Real se había crecido en la segunda parte. Y todo se puso mejor cuando Solari sacó del campo a Casemiro para meter a Isco, lo que iba a permitir a los gipuzkoanos encontrar más espacios. Aún se puso el encuentro más de cara cuando Lucas Vázquez vio en el minuto 60 la segunda amarilla y fue expulsado. El gallego, con un juego muy sucio todo el partido y actitud bastante macarra, se encaró a Munuera Montero y salió del césped rompiendo la camiseta. Es lo que tiene no saber perder.
El Real Madrid había rebajado la presión mientras que la Real seguía creyendo y parecía más cerca que nunca de sacar algo positivo del Bernabéu. El balón ya duraba más.
Y en el 65 llegó el tercer regalo de la tarde. Curiosamente lo protagonizó el colegiado que perdonó un penalti de Rulli sobre Vinicius en el que no intervino ni en el VAR. Si no se ganaba este partido ya era como para no confiar nunca más en sacar algo positivo de Madrid. Y de nuevo el argentino salvó a la Real por partida doble, aunque también lo hizo Courtois a tiro de Januzaj. Era tarde de porteros.
La Real estaba mucho mejor que el Madrid en la segunda parte. Los blancos estaban 'rotos'. Lástima que no concretara todas las que estaba teniendo sobre todo por medio de Januzaj y Zurutuza. Los blanquiazules estaban perdonando y eso en este campo era muy peligroso.
Pero llegó una decisión importantísima de Imanol. Metió en el campo a Pardo y el riojano se lo agradeció con una gran asistencia de Willian José que ponía la puntilla con todo merecimiento. Pardo, solo dentro del área, no perdonó delante de Courtois, con la cabeza. El Real Madrid había terminado siendo un juguete en manos txuri urdin. Ver para creer. Y Willian perdonó el tercero.
El partido no dio más de sí. ¡Ni falta que hacía! La Real lograba un triunfo histórico en el Santriago Bernabéu y logró hacer vulgares a los de Solari. Imanol y la Real están de vuelta.
Los Reyes Magos no se habían olvidado de la Real y qué mejor regalo que tres puntos.
La Real Sociedad recibirá al Espanyol en la jornada 20 de Liga. La última de la primera vuelta. El partido tendrá lugar el lunes 14 de enero en Anoeta a partir de las 21 horas.