El entrenador de la Real Sociedad, Imanol Alguacil, no escondió su satisfacción por el triunfo de su equipo ante el Espanyol, el segundo de la temporada en casa en liga, y se declaró "orgulloso porque se han conseguido unos puntos que eran muy importantes".
"Si no ganamos el otro día en el Santiago Bernabéu y hoy ante un gran equipo tampoco lo hubiéramos hecho, todos sabemos con 19 puntos dónde estaríamos ahora", recordó Alguacil.
El entrenador blanquiazul no tiene explicación al cambio operado por la Real en solo dos semanas, con dos triunfos en Liga y un empate en el campo del Betis en Copa, aunque destacó la "valentía" de sus jugadores en estos compromisos, un valor que espera mantener en el futuro para tener un equipo "muy, muy competitivo".
El técnico guipuzcoano reconoció que le tocó sufrir mucho en el banquillo ante un Espanyol que apretó en muchos tramos del partido, algo que él esperaba ya que su rival "tiene un equipo con una gran calidad y ha planteado un partido muy difícil".
El sufrimiento tuvo su origen en dos vías diferentes, según explicó Imanol, una la propia calidad del Espanyol y la otra el hecho de quedarse con un jugador menos los últimos veinte minutos tras la expulsión de Mikel Merino.
La alegría, por todo ello, fue mayor para la plantilla blanquiazul y para el propio técnico que se declaró "satisfecho" de la actitud de la Real y también del acierto en las jugadas a balón parado, un arma de doble filo porque dio goles a su equipo pero también al equipo catalán.