Sigan abriendo paso. Porque ahí está la Real Sociedad. Un paso largo, firme, camino de los sueños. Esta Real sueña despierta con algo muy bonito. Está llamando a la puerta de Europa, pero de verdad. Por la puerta grande a Europa. Al ritmo de Odegaard, con la batuta de Oyarzabal, con el olfato de Willian José y una tropa fiel a su entrenador. Ahí está también Imanol Alguacil. De momento, como se dice por el sur, que le quiten lo bailao. Y que no se despisten los grandes. Por si acaso.
Esta Real Sociedad ilusiona. Porque gana casi siempre. Y cómo gana. Una primera parte de matrícula para romper la fortaleza del Alavés. Pareció un juguete roto en manos de un señor equipo. No fue el mejor regreso posible de Asier Garitano a la que fue su casa, donde no triunfó. Alguacil sí va por buen camino, pero queda mucho. Pero su Real es tremenda. La pinta es tremenda.
Tres goles para todos los gustos. Una definición exquisita, un remate perfecto y un penalti. Un doblete de Oyarzabal y otro tanto de Willian José para llevar la fiesta al Reale Arena
El golpe al Atlético no fue en espejismo. Ganó al Espanyol y bien ganado y repitió ante el Alavés. Un fútbol de verdad, de velocidad y ocasiones. Y goles. Para todos los gustos. Una definición exquisita, un remate perfecto y un penalti. Quién da más. Esta Real da mucho y bueno, como Oyarzabal cuando coge la pelota. Como Odegaard, que se divierte como pocos en un campo de fútbol.
Pero además Imanol ha encontrado la fórmula para tener metido en el lío a casi todos los jugadores. Al menos a un buen puñado de jugadores que deben tirar del carro en busca del sueño europeo. Y el carro va bien, lleno de gente. Ahí está Willian José pero Isak no se queda atrás. Cuando Illarramendi esté bien va a tener un serio problema para jugar.
En tres zarpazos el partido quedó visto para la sentencia. Y antes del descanso. Oyarzabal cerró con mucho gusto un pase mágico de Odegaard. El internacional español se inventó luego un centro que cabeceó como un killer Willian José. Y Oyarzabal, en un no pero sí de Medié Jiménez, marcó el penalti con mucha soltura. Media paradinha por el camino, otro golazo.
La Real tendrá en Sevilla un duro examen para ver dónde está su techo. De momento, el equipo de Imanol Alguacil va por buen camino. Y manda cada día un serio aviso a los grandes
Esto de ganar y ganar, y hasta fácil, permite hacer rotaciones con tantos partidos en tan poco tiempo. Descanso para Willian José u Oyarzabal para que otros compañeros se suban al carro. El carro que va por buen camino hacia Europa. El carro que ha vuelto a ilusionar a la afición realista. Sólo Portu dormirá con cierto cabreo por ese penalti que falló. Pero lo que disfrutarán en ese espectacular Reale Arena viendo cómo su equipo gana y gana.
El domingo en Sevilla será otro día bonito. Un día para ver si esta Real está para cosas grandes. De momento va por el buen camino. Y como los grandes se despisten...