Hace tres días que terminó 2019, un año que para un jugador de la Real Sociedad ha ido claramente de menos a más. Se trata de Álex Remiro, uno de los refuerzos del conjunto txuri urdin el pasaso verano.
El guardameta de Cascante comenzó el 2019 al igual que terminó 2018. Es decir, totalmente fuera de los planes del Athletic Club por su intención de no querer renovar con los rojiblancos. Primero Eduardo Berizzo y después Gaizka Garitano no lo incluyeron en ninguna lista ni para Liga ni para Copa.
A partir de enero esta situación continuó, pero al menos ya era libre para negociar con el club que quiera. Y el elegido fue la Real Sociedad. Este pasado verano se puso ya a las órdenes de Imanol Alguacil, si bien al arquero elegido para arrancar el campeonato fue Miguel Ángel Moyá.
El balear disputó las seis primeras jormadas y la séptima y octava, pero a partir del partido frente al Betis de la jornada 9 llegó la oportunidad para Álex Remiro, y desde entonces se ha mantenido fijo en el arco.
En la primera rueda de prensa que concedió como jugador de la Real, el navarro dijo tener mucha confianza en sí mismo, así como que se ponía "buena nota" en las actuaciones completadas hasta el momento.
El 2020 todo indica a que continuará con su progresión, y que, salvo lesión o sanción, será el portero de Imanol Alguacil en LaLiga.