Con mucha ilusión... pero también con muchas bajas. Así es como afronta la Real Sociedad el arranque liguero, que en su caso tendrá lugar este domingo, a las 16 horas, frente al Real Valladolid en el José Zorrilla.
Y es que el equipo txuri urdin llega a este arranque de la competición con lo justo. Entre lesiones, la covid-19 y compromisos internacionales con las selecciones, Imanol Alguacil ha tenido que echar mano del Sanse en numerosas ocasiones.
Es lo que sucedió por ejemplo este pasado sábado en el amistoso frente al Deportivo Alavés. La idea era haber sacado dos onces de garantías tanto en el choque de la mañana ante los babazorros, como en el de la noche contra Osasuna. Pero las numerosas ausencias llevaron al técnico oriotarra a tener que alinear en el primer caso a un equipo prácticamente completo del filial.
Son muchas las bajas con las que cuenta la Real Sociedad en la actualidad. A las de larga duración de Illarramendi, Sangalli y Guevara, hay que unir las de Merquelanz, Nacho Monreal, Guridi y habrá que esperar a ver cómo llegan Barrenetxea y Zaldua, si bien el lateral derecho lo tiene muy difícil. El donostiarra ya podría participar en la sesión del martes, ya que este lunes los jugadores tendrán jornada de descanso.
Por el contrario recupera a los internacionales: Martin Zubimendi, Diego Llorente, Mikel Merino y Alexander Isak y también se ha incorporado ya Januzaj, aunque apenas ha trabajado aún con el grupo.
La pasada temporada también terminó con muchas bajas en el equipo, e Imanol Alguacil tuvo que recurrir de nuevo al filial. No le fue nada mal. Y es que por ejemplo Martin Zubimendi fue uno de los futbolistas más destacados tras el confinamiento, y también disputó buenos minutos Naïs Djouahra. Ambos han renovado el contrato con la entidad guipuzcoana este verano.