La Real Sociedad B se llevó este sábado los tres puntos del Carlos Tartiere en un partido anodino que supo gestionar mejor que el Real Oviedo y que se decantó en la suerte de los penaltis, con un final de locura en el que Valera marcó una pena máxima a tres del final y Zubiaurre paró otra instantes después al pichichi azul, Borja Bastón.
La primera mitad transcurrió sin ocasiones claras, pero desde el principio fue el conjunto txuri urdin quien más iniciativa y control del juego tuvo, obligando al Oviedo a defender en su área los intentos de profundizar de los donostiarras.
Los de Ziganda probaron a alargar el equipo buscando centros desde los flancos, pero ni Mossa conectó con Bastón las veces que lo intentó ni Viti logró rematar entre los tres palos otro de los centros del lateral al área, el más peligroso para la meta defendida por Zubiaurre.
La Real amasó el esférico y se llevó casi todas las segundas jugadas que salían de los despejes de la zaga azul, aunque también sin éxito: los tiros de Alkain y Olasagasti se fueron fuera, sin obligar a Femenías a intervenir.
Tras la reanudación se afinaron los ataques de ambos equipos, y primero Alkain rozó el gol tras estrellar un potente disparo contra el poste, y luego fue Viti quien, en un par de jugadas individuales, puso en verdaderos apuros a la zaga donostiarra aunque sin llegar a disparar.
El Sanse lo intentó jugando en largo con Gabilondo, pero no llegó a profundizar y el Oviedo sacó toda su artillería -Montiel, Pombo y Matheus- sin llegar a firmar ocasiones claras de gol pese a volcarse en campo contrario.
El riesgo asumido por los azules benefició al equipo de Xabi Alonso, que encontró en uno de sus cambios, Valera, la clave para adelantarse en el partido.
Una rápida contra por la derecha acabó con el atacante txuri urdin siendo derribado en el área por Carlos Isaac, que vio la segunda y tuvo que ver desde fuera del campo como el propio Valera batía a Femenías desde el punto de penalti a tres del final.
Solo unos minutos después una mano de Gómez acabó con penalti a favor del Oviedo, pero Zubiaurre detuvo la pena máxima a Borja Bastón y Blasco evitó un segundo remate al despejar el peligro.
En la jugada siguiente Bastón volvió a rozar el tanto, de cabeza y en el córner resultante, pero su cabeceo se fue desviado y los tres puntos -que dejan al Oviedo de nuevo sin opción de play off- se fueron rumbo a San Sebastián como premio al oficio del filial blanquiazul.