La Real Sociedad ha plantado cara en el Reale Arena a un FC Barcelona que volvió a sufrir ante el equipo txuri urdin a pesar de adelantarse en el marcador en la primera acción del partido y que goleó tras la entrada de Ansu Fati.
Con el paso de los minutos, los pupilos de Imanol Alguacil se encontraron cada vez más cómodos en un partido que fue un auténtico toma y daca entre ambos equipos. En los primeros compases de la segunda mitad, la Real se encontró cada vez mejor y llegó a soñar con volver a dar la sorpresa al equipo culé.
En el minuto 53, Brais Méndez se encargó de botar una falta lateral que trazó una parábola imposible y se fue cerrando hasta entrar en la portería de Ter Stegen. Un tanto que celebró el equipo txuri urdin y la afición del Reale Arena, pero que anuló el colegiado Munuera Montero, sin ayuda del VAR, al considerar que Le Normand, Zubimendi y Elustondo estaban en posición antirreglamentaria.
Un fuera de juego posicional que echó por la borda cualquier aspiración de la Real Sociedad de dar la campanada, y más aún cuando Dembélé y Lewandowski marcaron sendos goles pocos minutos después.