Siempre se dice que a una derrota hay que tratar de buscarle el lado positivo, si es que lo tiene. De la de la Real Sociedad ante el Real Valladolid en el José Zorrilla (1-0) se pueden extraer dos: un encuentro menos hasta el parón por el Mundial de Qatar 2022, pero sobre todo el debut más que esperanzador de Pablo Marín.
Octubre no está dando tregua a los txuri urdin ni en descanso ni en cuanao a la enfermería, de hecho en el choque en el José Zorrilla, David Silva se quedó en el vestuario al descanso por molestias. Por eso todo lo que sea tener jugadores de los que poder tirar es importante. Corría el minuto 74 cuando el Imanol Alguacil dio entrada al canterano Pablo Marín en lugar de Take Kubo, que lleva muchos partidos seguidos jugando y de nuevo este sábado no paró de pelear.
Los minutos del riojano (19 años) sobre el verde fueron muy buenos. Mostró visión de juego, buenos controles, se asoció bien con el resto de compañeros, pidió balón e incluso se atrevió con el remate, aunque le salió alto. Seguro que Imanol echa mano de él antes del parón porque demostró que puede aportar a este equipo.