Cinco días para que cierre el mercado de fichajes de invierno 2025. Eso es lo que resta para apuntalar las plantillas para lo que resta de temporada, porque ya no habrá más oportunidades. En el caso concreto de la Real Sociedad ha habido movimientos en esta ventana, pero todos ellos de salida. Sadiq Umar, Jon Magunazelaia y Urko González de Zárate han salido cedidos, y no ha llegado nadie a una plantilla que sigue viva en las tres competiciones: LaLiga EA Sports, Copa del Rey y Europa League.
"Yo no voy a pedir refuerzos. Yo lo que tengo que hacer es trabajar a muerte para sacar rendimiento de esta plantilla, y ahora más que nunca estoy orgulloso de esta plantilla y de estos jugadores por todo lo que me han dado a mí y por todo lo que le han dado a este club en estos últimos años. Ahora más que nunca, yo con esta plantilla. Yo no lo he pedido, y tampoco lo hemos hablado. Tampoco me parecería bien ni justo en estos momentos porque hayamos perdido y la imagen haya ha sido la que ha sido, empezar a dudar hoy de estos jugadores", dijo Imanol Alguacil tras la derrota contra el Getafe del pasado domingo.
No obstante, como viene informando ELDESMARQUE desde hace varios días, el club estudia la posibilidad de incorporar a un jugador de ataque, bien delantero o extremo, y sería en calidad de cedido y de rendimiento inmediato. Pero no queda mucho margen de maniobra.
Los movimientos que ha hecho la Real Sociedad en lo últimos mercados de fichaje en la parcela ofensiva no han sido muy exitosos. Desde la salida de Isak, sólo Alexander Sorloth ha dado rendimiento, pero ni Sadiq (20 millones de euros) ni Carlos Fernández (10 millones de euros) han dado lo que se esperaba de ellos. De momento tampoco Orri Oskarsson (20 millones), pero el islandés aún es joven (20 años), y no ha tenido mucha continuidad.
La Real Sociedad vivió en 2015 una situación muy surrealista en el mercado de invierno. La entidad txuri urdin se decantó a última hora por fichar el mediocentro ofesivo sueco de origen marroquí Nabil Bahoui, del AIK. El jugador internacional de 23 años llegó a estar inscrito en la LFP, pero en el último momento el presidente del club nórdico dejó sin efecto el preacuerdo que tenían. Faltaban 15 minutos para el cierre de mercado y el acuerdo era por cuatro millones de euros. El jugador se quedó en Suecia, y al final no llegó a hacer una carrera destacada. En la actualidad se encuentra sin equipo.