La posible baja de Fernando Calero en el RCDE Stadium hace peligrar la posibilidad de jugar con cinco atrás ante el RCD Espanyol. El central vallisoletano no se entrenó con el grupo este jueves por un proceso febril que lo convierte en duda para el próximo encuentro.
Su ausencia en el entrenamiento fue suplida por el central y capitán del filial Mario Robles. Lo que hace contemplar que Sergio González, tal y como confesó en rueda de prensa, mantiene abierta la opción de regresar al esquema de cinco defensas.
Mario Robles no es habitual en los entrenamientos del primer equipo
No obstante, se antoja complicado que el técnico catalán apueste por jugadores del filial como Mohamed Salisu o el propio Mario. De no llegar Calero a tiempo, Sergio se podría ver obligado a formar con cuatro defensas, con la pareja de centrales compuesta por Kiko Olivas y Joaquín Fernández como protagonista.