Un grano de arena que fue determinante

"Viene para aportar su grano de arena". Ésta fue la respuesta de Sergio González cuando fue cuestionado sobre el peso y la relevancia que debía tener Waldo Rubio tras su ascenso al primer equipo para ocupar la plaza de Pablo Hervías, lesionado de gravedad.

Inicialmente parecía que tendría un puesto secundario, pero el resultado y el rendimiento hicieron al pacense un activo diferencial del primer equipo en las últimas semanas de competición. Cuando el Real Valladolid se jugaba la salvación, el '7' fue titular en cuatro partidos consecutivos, rindiendo con excelencia y determinación.

Waldo Rubio ha cerrado la temporada con 2.432 minutos, siendo 491 con el primer equipo

Con la fuerza para sumar cuando el equipo más lo necesitaba, Waldo Rubio firmó una victoria trascendental. Su golazo ante el Athletic Club fue capital para la celebración de salvación que el Club hizo pocas semanas después. Aquel derechazo fue tan bonito y plástico como importante para un jugador que disputó algo más de 1.900 minutos con el filial, pero que el entono pucelano tenía muy presente desde la pretemporada.

La victoria (2-0) en verano ante el Rayo Vallecano en Íscar tuvo la firma del jugador. Entonces era un desconocido, pero, un año después, será un futbolista determinante en la programación de Sergio González. Todo por su crecimiento, evolución y mejora.

Contrato hasta 2022

La progresión del ex del Córdoba CF en su primer año de blanquivioleta ha sido mágica. Peso relevante en la temporada del equipo de Miguel Rivera y un plus diferencial en el tramo final de la campaña de los de Sergio González hace que ese grano de arena que llegó al vestuario del primer equipo en el mes de abril tenga un puesto asegurado y reservado en el contexto profesional hasta el año 2022.