Tras confirmarse en la noche del martes su cesión al Real Valladolid por una temporada, Andrey Lunin se entrenó por primera vez con sus nuevos compañeros en la mañana de miércoles en los Campos Anexos, primera de las dos sesiones que tiene el equipo antes de descansar el jueves.
Como es habitual en los guardametas blanquivioleta, el ucraniano primero se ejercitó a las órdenes de José Manuel Santisteban junto a Jordi Masip y José Antonio Caro, ya sin Samu Pérez, que estuvo con el Real Valladolid Promesas.
Desde el primer momento el meta destacó por alto, gracias a su gran altura (1,91 metros), y en sus buenos reflejos bajo los palos tanto en el trabajo con el preparador de porteros como, posteriormente, en los ejercicios grupales con Sergio González al mando.
Las buenas noticias llegaron por parte de Álvaro Aguado y Óscar Plano. Los dos realizaron la primera parte del entrenamiento con el resto del grupo desde el principio, a pesar de que el jienense se vio obligado a retirarse cojeando del césped el día anterior y de que el madrileño llevara varios días tocado por unas molestias en el pie.
Sin el lesionado Luismi Sánchez y con Mohamed Salisu y El Hacen El Id como representantes del filial pucelano, la otra ausencia fue la de David Mayoral, con permiso del Club, que está muy cerca de marcharse cedido al UCAM CF de la Segunda División B.