Los nervios de un partido que podía llevar a la salvación al Real Valladolid hace justo un año se vieron muy reducidos cuando Sergi Guardiola fue derribado en el área del Rayo Vallecano. La acción de Abdoulaye Ba sobre el delantero de Jumilla parecía muy clara y José María Sánchez Martínez no dudó. Decretó penalti y Enes Ünal no falló.
El turco, gran señalado durante toda la temporada, no dudaba y seguía siendo lo infalible que se había mostrado desde los 11 metros en todo el tramo final de la temporada. Stole Dimitrievski acertó el lado de la ejecución, pero no la altura y el Pucela se adelantaba en el marcador para delirio de los muchos aficionados del Pucela congregados en las gradas de Vallecas.
El duelo no había hecho más que empezar y el reloj mostraba las 18.35 horas del 12 de mayo de 2019, pero el Real Valladolid ya iba por delante en el marcador y los aficionados pucelanos podían respirar, al menos, durante un rato de aquella calurosa tarde de domingo.