El Real Valladolid está a un "pasito" de cerrar el objetivo de la temporada. El propio Sergio González ha denominado así a lo que le falta al equipo blanquivioleta para certificar su continuidad en LaLiga Santander y, posiblemente, no haya mejor rival ni escenario para ello que el FC Barcelona, rival pucelano para este sábado.
Ganar al conjunto de Quique Setién sería, según el propio entrenador, el "broche de oro" a la temporada. Los tres puntos significarían la salvación matemática y el rival, el éxito que se le lleva resistiendo al equipo toda la campaña. Imponerse a un equipo de la entidad del culé es el objetivo que le falta a un vestuario que vivirá este encuentro con cuatro bajas en su citación.
Sin Pedro Porro, Hatem Ben Arfa, Míchel Herrero y Mohamed Salisu en la enfermería, la lista de 23 jugadores formada por el entrenador catalán lleva a pensar en un pequeño cambio de sistema en el entramado del Pucela. Volviendo al rombo y a la presencia de tres centrocampistas y un mediapunta, la apuesta de ElDesmarque Valladolid para el once blanquivioleta es la siguiente.
Con el arbitraje del valenciano Antonio Miguel Mateu Lahoz, el Real Valladolid quiere conseguir una victoria que le lleve de forma definitiva a la salvación matemática en LaLiga Santander. Un punto o una derrota no harían peligrar la salvación blanquivioleta, pero sí que haría que ésta dependiese del duelo del RCD Mallorca en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán del domingo.
Antes de la visita de los de Vicente Moreno a Sevilla, el Real Valladolid quiere tener certificada su presencia en la competición liguera de la temporada 2020/2021, aquélla que se puede cerrar con la victoria ante el Fútbol Club Barcelona, un "broche de oro" para una temporada que se certificaría a falta de dos jornadas y por la puerta grande.