La victoria (2-1) del Real Valladolid ante el Getafe CF dejaba la visita blanquivioleta al Estadio de El Sadar como una "oportunidad de oro" para los pucelanos. Conseguir los tres puntos sería el cambio de tendencia definitivo para un equipo que se enfrentaba al Club Atlético Osasuna con un plan muy fijo y establecido.
La propuesta más básica y que más y mejor define a Sergio González esuvo presente en tierras navarras. Buscando minimizar errores propios, potenciando los del rival y creciendo desde la portería a cero, al plan de Sergio González sólo le faltó acierto y cierta consistencia. Con mayor claridad de Fabián Orellana, que marró dos ocasiones claras, el Real Valladolid se hubiera llevado la victoria pero éste sería un análisis pobre e injusto.
Sin ese acierto pero, tampoco, sin ideas alternativas ni contundentes en el partido, la propuesta de Sergio se queda corta, como tantas y tantas veces. Así, y pese a sumar y no encajar, el Real Valladolid desaprovecha una gran oportunidad de dar un golpe sobre la mesa con dos victorias consecutivas que hubiera lanzado a un equipo que en Pamploan fue de autor.
La victoria ante el Getafe CF, lejos de potenciar la versión más arriesga y ambiciosa del Real Valladolid, ofrecía la más conservadora y aquélla en la que se potencia más minimizar errores y ser fiable que arriesgar y buscar la portería rival. Guste más o menos, siendo más o menos atractiva, ésta es la idea de Sergio González y la que se vio en el Estadio El Sadar.
Tras los primeros 45 minutos, el encuentro dejaba pocos registros del Real Valladolid en campo contrario. Sergio Herrera estaba inédito en exigencia y el Real Valladolid no conseguía llegar al área rojilla. Pese a ello, no se veía una sensación de incomodidad en los de Sergio González. Todo parecía estar dentro del plan establecido por el equipo para el duelo ante los de Jagoba Arrasate.
Cumpliendo con lo diseñado, el paso por los vestuarios no cambió en exceso al Real Valladolid porque todo estaba dentro de lo planificado. Los de Sergio González querían tener el duelo controlado para llevarlo con vida a los últimos minutos. La idea estaba clara y se pudo llevar a la práctica cuando se llegó a los últimos 20 minutos con el empate inicial pese al tanto anulado a Jonathan Calleri en el minuto 36.
El gol del delantero argentino pudo cambiar el partido pero sin él, el encuentro caminó hacia la idea de Sergio González y hacia una evolución que el equipo visitante dio para los últimos 30 minutos. El último tercio del partido cambió su tendencia. El Real Valladolid se vio con espacios y oportunidades y las buscó desde la participación de los delanteros y la llegada de los extremos.
Con Óscar Plano pero, sobre todo, desde Fabián Orellana, el Real Valladolid dio un paso al frente. Sin acierto de cara a la meta navarra, el duelo daba un giro importante al ver a un Real Valladolid con ideas y posibilidades ofensivas. El encuentro se abría y las posibilidades de gol crecían. Tanto en el campo local como en el visitante.
Avanzar las líneas conlleva unos riesgos que el Real Valladolid asumió en cierta parte para buscar la victoria. Un duelo menos controlado pero con más posibilidades de victoria generó mayor presencia y protagonismo de lo porteros. Pese a ese crecimiento en la creación de ocasiones, el marcador no se movía ni se movería.
Con todo, el partido terminaba con el empate inicial en una muestra muy ilustrativa de lo que buscó el Real Valladolid en los primeros 60 minutos y aquéllo que no consiguió evitar pese al estirón que dio en una fase importante de la última media hora de juego. Con mayor convencimiento y acierto de, por ejemplo, Fabián Orellana, el planteamiento de Sergio de controlar para ajusticiar se hubiera cumplido a la perfección pero se quedó corto de tiempos, acierto y alternativas.
Totalmente de acuerdo con el comentario de Javier. Hoy Sinergio duerme a pierna suelta con su resultado favorito, el empate a nada.
Totalmente de acuerdo con la exposición Velasco. Con otro entrenador menos amárratelgui se podría haber conseguido la victoria , pero ya hace mucho tiempo que no nos sorprende. Los cambios sólo los ve el mister. El partido pedía a Jota y Toni, e incluso haber jugado con Michel y Mesa juntos Porque no? Que aporta Alcaraz? No se si nos salvaremos pero creo que el Real Valladolid tiene plantilla para jugar mejor y de otra manera. Mención aparte al derroche físico de Janko y mención aparte a Bruno, minuto 95 deja controlar girarse y disparar a Budimir, no debería jugar ni un minuto más , más que nada porque no tiene nivel para jugar en primera. Oportunidad de oro perdida pero no nos debe sorprender.