No empezó bien el Real Valladolid en el primer partido de Pezzolano en el banquillo blanquivioleta. Jordi Masip detuvo las acometidas de Amath N'Diaye y evitó que el Mallorca se adelantara en el marcador.
No había disparado el Pucela en todo el partido, pero en su primer chut logró el ansiado tanto que le dio la tranquilidad que carecieron hasta ese momento. Kike Pérez cazó un balón suelto y, sin oposición, superó a un Rajkovic que solo pudo limitarse a hacer la estatua.
Un gran gol que puedes ver en el vídeo adjunto a esta noticia.