Al descanso del partido que suponía la vuelta de la Selección Española al Estadio José Zorrilla una boca de riego hizo trabajar a fondo a los operarios para solucionar el problema.
Este aspersor se rompió y generó un gran charco en la línea medular del campo. La segunda mitad se pudo restablecer sin más contratiempos que esa incidencia en el césped.
La afición se volcó desde el principio en un partido que finalizó con victoria de España por 3-1 y una grave lesión de Pablo Gavi en la primera parte del choque.