Lo mejor y lo peor del Pucela en el Trofeo Ciudad de Valladolid

El Real Valladolid ganó (2-0) ante el AVS Futebol en el Estadio de Butarque en el Trofeo Ciudad de Valladolid celebrado ahora por el parón internacional de noviembre. Un encuentro en el que se vio un Pucela de más a menos, con unos jugadores más enchufados que otros y dejando la portería a cero.

Lo positivo

En el encuentro ante el conjunto luso hubo un nombre que destacó por encima del resto, el de Marcos André. El punta brasileño marcó dos goles con grandes definiciones, dejó algún detalle de calidad y jugó 60 minutos, 15 de ellos tirados en banda, como apuntó Pezzolano "para que siga cogiendo ritmo". Esta diana le puede dar confianza de cara a la competición oficial, igual a que a Cenk Özkaçar se la darán los minutos que estuvo sobre el césped. Su vuelta es otra de las noticias positivas para el Pucela.

Otro de los aspectos a tener en cuenta para bien es que los blanquivioletas no encajaron y el conjunto portugués apenas tuvo ocasiones de peligro. Además, Paulo Pezzolano pudo probar diferentes jugadores y sistemas en la segunda mitad con el 2-0 a favor.

Lo negativo

En esta prueba se vio a algunos jugadores algo desenchufados del resto. Es el caso de César de la Hoz, Selim Amallah y Amath Ndiaye, que fueron cambiados al descanso, ya que su nivel no fue el adecuado en el primer acto. El propio entrenador dio un toque de atención a estos futbolistas, y alguno más que no demostró un buen nivel, con la siguiente frase: "Confirmar que algunos jugadores siguen creciendo y a otros les está costando un poco".

También hay que destacar negativamente los minutos que tuvieron Lucas Rosa y Luis Pérez, no porque lo hicieran mal, si no porque son jugadores con mucho desgaste a lo largo de la temporada. No tuvieron participación ni Álvaro Aceves, ni Mario Maroto ni Iván San José, 'Chuki' y muy poca Koke Iglesias, algo que llama la atención, porque podría ser un partido para que cojan minutos y rodaje con la primera plantilla. Los 45 minutos de Juanmi Latasa tampoco fueron buenos, ya que falló la que tuvo y vio una cartulina amarilla por encararse con un rival.