Más calmado, y varios minutos después de que terminase el partido, el delantero del Real Zaragoza Ángel Rodríguez ha salido a zona mixta para dar su visión sobre el partido jugado. Tras unas primera palabras de tranquilidad sobre su estado físico -solo calambres- el jugador ha hecho un breve análisis de lo que ha supuesto el partido para el conjunto aragonés.
El ariete, primeramente, ha hablado de López Amaya: "Gracias a Dios he tenido un cuarto de hora para calmarme. El árbitro no ha estado bien más por su prepotencia y su manera de tratarnos que por sus decisiones. La expulsión de Dorca no es. Nos estamos jugando la vida y una decisión como esa puede condicionar que estemos en un puesto o en otro".
Sin dedicarle más tiempo al colegiado, el tinerfeño ha querido mirar hacia delante y hacia los cuatro partidos que quedan por jugarse: "El equipo ha competido bien. Con la expulsión nos hemos echado un poco atrás para intentar aguantar el 1-2. Hay que ser optimistas. Creo que es un buen punto contra un gran rival. Aquí muchos equipos de la zona alta han pinchado. Hay que intentar competir al máximo, sobre todo contra el Nástic, que es una final para nosotros. Desde ahí, a mirar hacia delante.