El último precedente de un enfrentamiento entre el Huesca y el Real Zaragoza en El Alcoraz tuvo lugar en la temporada 2008-2009. Concretamente, fue un 5 de mayo de 2009 y el conjunto aragonés salió airoso de esa batalla. Un gol de Ander Herrera le sirvió a los de Marcelino García Toral para conquistar El Alcoraz (0-1) y sumar tres puntos vitales en el tramo decisivo de la temporada.
Y es que después del choque en el campo de los altoaragoneses, al Real Zaragoza le quedaban seis partidos en los que se jugaba sus aspiraciones de ascenso. Aquel refuerzo moral, en forma de tres puntos, le valió para que hiciera casi un pleno de victorias: cinco triunfos de seis posibles y un empate en la última jornada ante el Rayo Vallecano, dejando al equipo en la segunda posición.
Aquel 5 de mayo fue la confirmación de Ander Herrera entre los grandes. Marcelino le cedió el testigo de la titularidad en detrimento del brasileño Ewerthon y el canterano resolvió la papeleta con sobresaliente. Muy activo durante todo el partido y un gol de pícaro -el único del partido, de hecho- que le supondría al Real Zaragoza tres puntos de oro y el refuerzo moral de llevarse el derbi aragonés.
Herrera estuvo sobre el césped hasta el minuto 77, cuando fue sustituido por el camerunés Franck Songo'o. Hasta ese momento, fue el que manejó el juego de un Real Zaragoza enrachado y que, aquel día, se llevó el derbi casi por inercia. La solidez defensiva del conjunto zaragocista también fue decisiva ya que Rubén Castro y Roberto amenazaron en varias ocasiones la portería de un Toni Doblas que, aquella tarde, salvó los muebles en varias ocasiones.