A unas horas del cierre de mercado, el Real Zaragoza sigue preparando el choque del domingo frente a la Sociedad Deportiva Huesca. La sesión de trabajo de este miércoles ha contado con la presencia de Cezary Wilk y Leandro Cabrera, que continúan pendientes de conocer de manera definitiva su futuro. Aunque todo parece indicar que ambos se quedarán en la capital del Ebro, el club sigue barajando sus posibles salidas.
Tanto el uruguayo como el polaco entrenan junto al resto de sus compañeros pendientes de lo que pueda suceder en las próximas horas. El Real Betis sigue pendiente del central blanquillo, aunque la no llegada de Álex Alegría dificulta la operación por Cabrera. Por ello, además de la reiterada petición expresa de Luis Milla para contar con sus servicios, parece que el uruguayo continuará en el conjunto aragonés.
Por su parte, a Cezary Wilk se le sigue buscando destino. Un destino que es cada vez más complicado encontrar, dada la lesión de rodilla que impidió al centrocampista tener minutos con el Real Zaragoza desde el mes de octubre del pasado año. Su posible salida implicaría buscar rápidamente un recambio de garantías en un perfil distinto al del polaco.
Tal y como reconoció Luis Milla en rueda de prensa tras el amistoso disputado en Teruel, las condiciones de Wilk son demasiado similares a las de Alberto Zapater. Aunque la principal idea del jugador es quedarse en Zaragoza, si surge la posibilidad de salir por petición del propio club no pondrá impedimento. El polaco volvía a jugar con la elástica blanquilla este sábado en Lugo, después de 9 meses sin hacerlo en competición oficial.