La entrada de José Enrique en el once titular y el regreso de Rubén Gracia 'Cani' tras su lesión han ofrecido un plus al Real Zaragoza. Ambos jugadores aportan experiencia y calidad sobre el terreno de juego. Dos factores que el equipo blanquillo nota con la buena relación de dos futbolistas que lo escenifican también en los entrenamientos.
Aunque sus primeros 90 minutos los completaba como central en Sevilla, José Enrique ya está ubicado en un lateral izquierdo en el que se ha afianzado con rapidez. El ex del Liverpool se ha acoplado perfectamente primero al esquema de Luis Milla y ahora al de Raúl Agné. Así, ha logrado dotar de solidez defensiva a la escuadra aragonesa por su costado y ya es un fijo sobre el césped.
Por su parte, Cani regresaba a la titularidad después de caer lesionado en el Ciudad de Valencia frente al Levante. El centrocampista exhibía ante el Almería su calidad y vuelve a ser pieza indispensable en el sistema de este Real Zaragoza. Ambos aportan dentro del campo una experiencia y unos galones que los blanquillos han echado en falta durante su ausencia.
Pero la relación de los dos jugadores también se plasma en las sesiones de trabajo. José Enrique y Cani parecen inseparables en los entrenamientos, realizando cada ejercicio en pareja. La buena relación entre ambos no es un secreto y la plantilla se beneficia de ello. Dos figuras importantes para el vestuario zaragocista que son inseparables fuera del campo e indiscutibles dentro del mismo.