Ya es habitual ver a Raúl Agné y Rubén Gracia 'Cani' charlando sobre el terreno de juego durante los entrenamientos del Real Zaragoza. El futbolista blanquillo se ha convertido en el principal apoyo del técnico de Mequinenza en su momento más delicado desde que llegó al banquillo. Un escudo para frenar el mal momento y la prolongación del entrenador en el campo.
Es su hombre de confianza, tanto para lo que sucede sobre el césped como para transmitir tranquilidad al vestuario. Con la salida de Narcís Juliá del club, Raúl Agné se quedaba prácticamente solo y con nulo respaldo de la directiva. A pesar de ello, el vestuario sí ha demostrado confiar en su técnico lanzando continuos mensajes de apoyo públicamente.
Ocurrió de manera clara tras la última derrota de los blanquillos contra el Nástic de Tarragona en La Romareda. Alberto Zapater y Rubén Gracia 'Cani' reconocían en zona mixta alegrarse por la continuidad de Raúl Agné a los mandos de un Real Zaragoza muy necesitado de puntos para revertir la complicada situación. Ambos se volcaban con el entrenador después de la dura derrota frente al cuadro catalán.
Este jueves, una vez más, Cani y Agné han mantenido una larga charla sobre el césped de la Ciudad Deportiva para corregir aspectos tácticos y buscar soluciones. La importancia del futbolista aragonés dentro del equipo es evidente y el de Mequinenza ha decidido darle el mando de operaciones para tratar de cambiar el rumbo de las últimas jornadas.