La buena segunda vuelta que está realizando el Real Zaragoza ha reforzado mucho la figura de un Natxo González que ha participado en un encuentro sobre liderazgo organizado en Zaragoza por la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA). En él, ha desvelado haber cumplido un sueño al fichar por el conjunto aragonés: "Cuando empecé a entrenar hace treinta años tenía el objetivo de llegar a entrenar un equipo como el Real Zaragoza. Los sueños, a veces, se hacen realidad". Palabras amables que saben muy bien con el equipo luchando por ascender a Primera división.
Para Natxo, la labor que hace como entrenador es "un trabajo de picar piedra". Una toma continua de decisiones "para mejorar lo que no haces bien y reforzar lo que haces bien". El entrenador vitoriano trabaja en ese sentido para conseguir un ascenso que, según sus palabras en el encuentro, no ve lejano. Como siempre, ha querido destacar el fin de toda la labor que están haciendo con el adjetivo "fantástico": "Estamos en el camino y este proyecto va a acabar fantásticamente".
Dentro de esta difícil singladura, Natxo ha querido destacar a los líderes "que tiene que haber dentro de un vestuario de 25 personas". Para realizar esta tarea, sus hombres son "Zapater, Gaizka Toquero, Mikel González y Cristian Álvarez". Jugadores todos ellos veteranos en que guían a una de las plantillas más jóvenes de la categoría.
Por último, Natxo se ha vuelto a acordar por segunda vez en tres días de la afición del Real Zaragoza: "Jugar en La Romareda aporta fortaleza. Este club es grande por su afición. Es una bendición que 30.000 personas estén empujando y está en nuestras manos que mantengan la ilusión". Un zaragocismo al que se le espera el sábado que viene contra el Almería.