El Real Zaragoza mantiene vivos diversos frentes. Más allá del deportivo, en el que las cosas no han comenzado bien en esta temporada, con el equipo en la zona baja de la clasificación, el club blanquillo también tiene la mirada en los juzgados, desde donde periódicamente llegan noticias de diversa índole relacionadas con los anteriores gestores.
La última, según informa El Periódico de Aragón, es la apertura de juicio oral contra los presuntos responsables de camuflar como finiquito lo que en realidad era el sueldo del exjugador zaragocista Peter Luccin. Además del propio jugador, la causa afectaría también al que fuera máximo accionista de la entidad, Agapito Iglesias, así como al exdirectivo Francisco Javier Porquera, al actual directivo Francisco José Checa y al Real Zaragoza como persona jurídica. Una maniobra que habría permitido el ahorro de 895.833 euros, cantidad que ahora deberían devolver entre todos.
La reclamación por parte de la Fiscalía y la Abogacía del estado solicita además penas de prisión de tres años en el caso de las personas físicas por un delito contra la Hacienda pública. A esta petición se le sumaría también una multa de dos millones de euros para cada uno, en lo que se incluiría al Real Zaragoza. Además, la entidad no podría recibir subvenciones, ni incentivos ni beneficios fiscales durante un periodo de cuatro años.
Los hechos se remiten al paso de Luccin por las filas del Real Zaragoza, al que llegó en el verano de 2007 por tres temporadas. Una campaña más tarde se marchaba al Racing de Santander en una operación de compraventa que se considera como una cesión encubierta y “posterior recompra ficticia”. Pese a sufrir una lesión en mayo de 2009, en su estancia en el equipo cántabro, se le realizó un nuevo contrato con misma fecha de finalización que el primero firmado con el club aragonés. El futbolista francés ya no volvería a vestir la elástica blanquilla y fue despedido en el verano de 2010 tras pago de 987.000 euros, de los que derivaría la cantidad ahorrada y que ahora supone un nuevo quebradero de cabeza para la directiva de la Sociedad Anónima Deportiva.
yo creo que directivos y políticos tienen que hacer inventario cuando acceden a un cargo y cuando lo dejan y pedir responsabilidades